Preparar este postre de galletas chocolate es muy simple y con pocos ingredientes, lo cual lo convierte en una opción ideal para satisfacer antojos repentinos de dulce o para impresionar a invitados en cualquier ocasión. Además, lo que realmente lo hace destacar es su ingrediente secreto, un toque especial que eleva su sabor.
Así que, la próxima vez que desees disfrutar de un postre delicioso, pero sin complicaciones, no dudes en probar esta receta de galletas de chocolate. A continuación, te mostraré cuál es el ingrediente secreto y te guiaré paso a paso en cómo preparar este irresistible postre.
El postre de galletas de chocolate con este ingrediente
El ingrediente secreto que hace que este delicioso postre de galletas de chocolate destaque es el almidón de maíz, el cual se emplea para elaborar una exquisita crema pastelera. Conocido también como maicena o fécula de maíz, este componente se obtiene al extraer el almidón del endospermo del grano de maíz, siendo prácticamente puro almidón, sin otras sustancias como fibra, proteína o grasa. Su uso como agente espesante es común en diversas recetas, aportando una textura cremosa y consistente, como en el caso de la crema pastelera.
El almidón de maíz es esencial en la repostería sin gluten, ya que proporciona esa esponjosidad característica sin contribuir significativamente al sabor o estructura del producto final. En la elaboración de horneados libres de gluten, encontrar el equilibrio adecuado entre harinas ricas en almidón y proteínas es crucial para lograr la textura, sabor y apariencia óptimos. Por tanto, este ingrediente no solo cumple un papel funcional, sino que también se convierte en un aliado fundamental para crear postres irresistibles para todos los gustos.
Chocolate y crema pastelera: una combinación perfecta
La receta para este exquisito postre de galletas de chocolate comienza con la preparación de una cremosa crema pastelera. En primer lugar, se disuelve el almidón de maíz con la leche y se incorporan las yemas de los huevos, creando una mezcla que se reserva para más tarde. En una cacerola, se combina leche, azúcar y esencia de vainilla, calentando a fuego medio bajo hasta que la leche comience a espumar ligeramente. Luego, se agrega la preparación de almidón y huevos, revolviendo enérgicamente para evitar que se queme y asegurando que espese correctamente. Una vez lista, la crema pastelera se reserva con papel film, dando paso a la construcción del postre.
Para ello, se disponen en una fuente capas de galletitas de chocolate, previamente remojadas en café para resaltar su sabor, intercaladas con generosas capas de la crema pastelera. Entre cada capa, se añaden trozos de dulce de leche para añadir un toque de dulzura. Para la culminación perfecta de este postre de galletas, se derrite chocolate, se le añade aceite y se baña el postre, que luego se enfría en el refrigerador durante una noche, permitiendo que todos los sabores se fusionen y se asienten para un postre con un sabor inolvidable.
