Esta semana en ‘La Promesa’, los espectadores serán testigos de cómo los destinos entrelazados de la nobleza y sus secretos oscuros continúan desplegándose en una trama que promete mantener a todos al borde de sus asientos. El epicentro de la tormenta emocional de esta semana es Jimena, cuya vida ha tomado un giro dramático y peligroso. Tras la impactante revelación de su falso embarazo, Jimena, desesperada y acorralada por las críticas de su familia, especialmente del duque de los Infantes, toma una decisión drástica que podría costarle la vida. Su intento de suicidio al lanzarse desde la balaustrada del palacio ha dejado a todos en vilo: ¿sobrevivirá a tal caída?
Por otro lado, Pelayo enfrenta sus propios demonios. En un intento desesperado por recuperar la confianza y el amor de Catalina, se ha abierto por completo, revelando sus oscuros comienzos en el mundo del tráfico de armas. Esta confesión no solo pone en riesgo su relación, sino que también añade otra capa de complejidad a la ya complicada dinámica entre los personajes. Catalina, abrumada y confundida, lucha por discernir entre la verdad y la mentira en las palabras de Pelayo. A medida que busca espacio para procesar esta traición, los espectadores no pueden evitar preguntarse: ¿podrá perdonarlo alguna vez? Con más secretos por revelarse, la saga continúa.
1Resumen del capítulo 341 del lunes 22 de abril: Crisis y revelaciones en La Promesa
El capítulo 341 de «La Promesa» arranca con la tensión al máximo tras el dramático intento de suicidio de Jimena. La joven se encuentra en estado grave tras su caída desde la balaustrada, y aunque aún hay esperanza, su pronóstico empeora a medida que pasan las horas. Este evento ha dejado en shock a toda la casa, desde los señores hasta el servicio, pero no ha detenido la acumulación de problemas personales y secretos que cada uno lleva consigo.
Mientras Simona continúa angustiada por el estado de su hija, Lope se enfrenta a su propio dilema, incapaz de olvidar el maletín lleno de dinero perteneciente a Vera, lo que sugiere futuras complicaciones. Por otro lado, la trama se complica con la suspensión de la boda de Pelayo, quien exige explicaciones a Catalina, añadiendo tensión a su relación. Simultáneamente, Rómulo introduce un nuevo elemento en la dinámica de la casa al traer a Ricardo Pellicer, un viejo amigo suyo, para ocupar el puesto de mayordomo. Ricardo, conocido por su carácter distante y reservado, promete traer nuevos desafíos y dinámicas al entorno de la mansión.
