Didier Reynders tiene su objetivo cada vez más cerca. El comisario de Justicia hasta finales de abril tiene como objetivo mediar con éxito en la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). La única incógnita que espera el también candidato para presidir el Consejo de Europa es el «cuándo» se sellará dicho acuerdo.
En la mesa de negociación están sentados el ‘superministro’ Félix Bolaños por parte del PSOE y del Gobierno junto a Esteban González Pons, quien ha mostrado en público y en privado sus reticencias a lograr un acuerdo en pleno ciclo electoral. Así, tiene ahora 24 días para dar luz verde a este pacto por una renovación que lleva congelada cinco años ante los intentos del PSOE de hacerse con el control del Poder Judicial, el Congreso y La Moncloa, una tríada con tan solo 121 escaños, 16 menos que el principal partido de la Cámara Baja.
Didier Reynders necesita lograr este acuerdo, mostrando así la necesidad de actuación del órgano que controla el Viejo Continente, un mensaje que frenaría las aspiraciones de los partidos antieuropeístas. Reynders muestra así un mensaje optimista, pero tanto el PSOE como el PP muestran en público una frialdad impropia entre dos partes que buscan un pacto. No obstante, «se cerrará en breve», según señalan fuentes conocedoras de la negociación a MONCLOA.
DESCONFIANZA ENTRE PSOE Y PP POR LAS EUROPEAS
El pacto se cerraría antes del cierre de abril si no se impone la línea dura, que ve el acuerdo como «una estratagema del PSOE» para venderlo en plena campaña de las elecciones catalanas. Para Reynders, lo más importante es cerrar el acuerdo y «estamos muy cerca de conseguirlo», ha destacado. De hecho, la negociación no se centra únicamente en la renovación del CGPJ sino también en una reforma para su elección, impidiendo así trabas innecesarias o que pase un lustro para poder cambiar a los jueces con un mandato prorrogado.
La negociación entre PP y PSOE por esta renovación y la reforma del CGPJ para elegir a los jueces ha tenido momentos muy tensos
Reynders tiene ahora hasta finales de este mes para poder cerrar el acuerdo antes de iniciar su preparación para las elecciones europeas, cuya campaña comenzará en la última semana de mayo. Para el comisario de Justicia de la UE no hay margen de error, pero considera que es un tema de «voluntad política». Reynders tiene de excedencia hasta el 25 de abril, aunque se comprometió tener el acuerdo pactado a finales de marzo. No obstante, las conversaciones se suceden, como también las críticas.
Así las cosas, Reynders tendrá que cerrar el acuerdo en las próximas dos reuniones que hay agendadas, aunque la segunda podría ser anulada si finalmente se sella el acuerdo. No obstante, «el PP y el PSOE esperarán hasta después de las elecciones europeas para anunciarlo», destacan las mismas fuentes. Esta lectura es la más factible, toda vez que tanto el PSOE como el PP han aparcado el debate y los ataques desde las primeras reuniones con Reynders. En este sentido, evitarían dar munición a Vox y a otros partidos con intereses en el CGPJ.
REYNDERS, LA FALTA DE PRESUPUESTOS Y ¿UNAS GENERALES EN INVIERNO?
Por ahora, González Pons y Bolaños muestran sus diferencias y la brecha que les separa en esta negociación, pero ambos son conscientes de la necesidad de reformarla, más ante la posibilidad de unas nuevas elecciones a finales de año ante la falta de Presupuestos y la ruptura de Podemos con Sumar.
La negociación entre PP y PSOE por esta renovación y la reforma del CGPJ para elegir a los jueces ha tenido momentos muy tensos. En plena Semana Santa, se canceló la reunión prevista, mientras no se ha vuelto a convocar la mesa para cerrar el acuerdo. No obstante, las negociaciones se suceden y solo faltan ciertos flecos, no tanto con los nombres, sino con la fórmula para renovar el órgano de los jueces.
En caso de que Reynders no llegara a tiempo, la Comisión Europea permitirá la entrada en escena de Vera Jourová, vicepresidenta. No obstante, su perfil no responde al conciliador Reynders y es de las duras a la hora de establecer relaciones diplomáticas.