El vapeo o el uso de cigarrillos electrónicos es una práctica aparentemente inofensiva que ganó terreno en los últimos años en España, en especial en la población menor de 30 años de edad. La mayoría de las personas que lo utilizan lo hacen con la falsa creencia de que es una opción mucho más saludable que el tabaco convencional, pero esto está muy alejado de la realidad. Recientes investigaciones arrojaron que vapear aumenta el riesgo de insuficiencia cardíaca, una condición que puede causar la muerte.
En especial, la insuficiencia cardiaca provoca que el corazón se vuelva muy débil o rígido para irrigar sangre con la eficiencia que debería. Los científicos alertan que una gran parte de la población que vapea, con edades comprendidas entre los 13 y 21 años, tiene mayor probabilidad de sufrir ude afecciones relacionadas con el corazón y el sistema circulatorio.
El vapeo no es una alternativa para dejar de fumar
El estudio realizado por la cadena de asistencia sanitaria MedStar Health insiste en que deben ponerse en práctica más investigaciones sobre los factores de riesgos asociados vapear, debido a que las consecuencias negativas podrían ser mucho mayores. Además, destacan que los cigarrillos electrónicos no deberían utilizarse como herramienta para dejar de fumar. Para eliminar el consumo de cigarrillo, los científicos sugieren realizar un tratamiento que combine la medicina con estrategias para abandonar este hábito.
Pese a que este estudio no demuestra de forma contundente y clara la relación entre los cigarrillos electrónicos y la insuficiencia cardíaca, los investigadores advierten de la muestra de la población confirmó que sí. Por otra parte, médicos del Instituto Nacional de Cancerología insisten en que vapear trae como consecuencia el consumo de los cigarrillos convencionales.
Efectos secundarios del vapeo
Además de afectar los pulmones y el corazón, vapear te puede provocar adicción, debido a que algunos de los cigarrillos electrónicos contienen nicotina, una sustancia altamente adictiva. También produce ansiedad y depresión, debido a que la nicotina acelera los procesos ansiosos; afecta la memoria, la atención, el autocontrol y la concentración. Sumado a esto, disminuye tu capacidad pulmonar, lo que reduce tu resistencia al ejercicio y genera cansancio y sensación de fatiga.
Quienes fuman cigarrillos electrónicos son más propensos a volverse fumadores de tabaco; causa insomnio y problemas para conciliar el sueño; también te hace propenso a sustancias químicas cancerígenas; provoca bronquitis crónica; y en el caso de los hombres, puede desarrollar impotencia y disfunción eréctil
