Las exportaciones chinas sumaron entre enero y febrero un valor total de 528.010 millones de dólares (485.400 millones de euros), una cifra que representa un avance interanual del 7,1%, según los datos publicados este jueves por la Administración General de Aduanas de China.
De su lado las importaciones del gigante asiático también crecieron, aunque a un ritmo del 3,5%, hasta 402.850 millones de dólares (370.340 millones de euros), lo que arroja un superávit de 125.160 millones de dólares (115.060 millones de euros).
Entre los principales socios comerciales del gigante asiático, las exportaciones chinas a la UE cayeron un 1,3%, hasta 78.256 millones de dólares (71.941 millones de euros) y las importaciones un 9,4%, hasta 38.992 millones de dólares (35.845 millones de euros).
En el caso de Estados Unidos, las exportaciones chinas aumentaron un 5% anual, hasta 73.420 millones de dólares (67.495 millones de euros), mientras que las importaciones cayeron un 9,7%, hasta 26.134 millones de dólares (24.025 millones de euros).
En el arranque de 2024, las relaciones comerciales entre China y Rusia continuaron estrechándose y las ventas chinas a su vecino del Norte aumentaron un 12,5%, hasta 16.808 millones de dólares (15.452 millones de euros), mientras que las importaciones desde Rusia sumaron 20.202 millones de dólares (18.572 millones de euros), un 6,7% más.
«Las exportaciones de China aumentaron interanualmente al ritmo más rápido desde mayo, y los volúmenes de exportación alcanzaron un nivel récord. Sin embargo, dudamos de la sostenibilidad de esta fortaleza, ya que los exportadores ahora tienen un margen más limitado para reducir los precios y asegurar su participación en el mercado», ha advertido Zichun Huang, economista para China de Capital Economics.
En este sentido, el analista señala que, si bien el sector exportador de China logró resistir la desaceleración global ampliando su cuota de mercado, esto se vio favorecido por la reducción drástica de los precios de los exportadores y la debilidad de la moneda, añadiendo que la bajada de precios ha reducido los márgenes de ganancias, que ya son bajos según estándares históricos, dejando un margen más limitado para seguir reduciendo precios, mientras que se espera que el yuan se aprecie este año.
