La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos de Andalucía (COAG-A) exige «la paralización inmediata» de las importaciones de fresas y otros productos frescos de Marruecos, tras «las reiteradas» alertas sanitarias que se han notificado en las últimas semanas, siendo «especialmente grave» la del pasado lunes en la que el sistema Rasff (Rapid Alert System Feed and Food) publicó que habían entrado al mercado español fresas de Marruecos con el virus de la Hepatitis A, lo que supone «un riesgo grave para la salud».
En un comunicado, apunta que la alerta se suma a las 47 alertas sanitarias de importaciones de Marruecos en el último año, 30 de éstas, notificadas por España, y que «se repite de forma continuada y reciente en el caso concreto de las fresas, ya que hay que recordar el pasado 14 de febrero se notificó la presencia de Norovirus GII en fresas de Marruecos, con riesgo potencialmente grave».
COAG-A advierte que la entrada de estos productos contaminados se debe a que solo se analizan de manera aleatoria «entre 1% y un 5% de los productos agroalimentarios que se importan» y, lo que es peor, a su juicio, «no se esperan los resultados para liberar la mercancía al mercado, por lo que los consumidores adquieren esos productos contaminados sin saberlo». «Es, a todas luces, un atentado contra la salud pública que está siendo permitido por el protocolo vigente. Un disparate», ha apuntado.
BLOQUEO DE IMPORTACIONES
Sin embargo, la organización agraria quiere hacer referencia a lo ocurrido hace unos años con el bloqueo de importaciones españolas a Alemania por un supuesto caso de E.Coli en pepinos que, «finalmente, resultó ser una denuncia falsa». Conviene recordar que en 24 horas se pudo localizar la partida supuestamente afectada y el origen exacto de la producción y la empresa, comprobándose que había sido un error.
La paralización en ese caso se llevó a cabo de manera fulminante, por lo que desde COAG se exige «la misma diligencia y celeridad con las importaciones de productos frescos de Marruecos, con el establecimiento de medidas cautelares de paralización temporal de las importaciones».
Por todo lo expuesto, COAG Andalucía exige además que se investigue el origen de estas alertas, qué empresa y en dónde se comercializaron los productos contaminados, así como que se conozcan las sanciones que se van a imponer.
Esta organización agraria demanda, asimismo, que se modifiquen los protocolos de control de las importaciones de terceros países y que los controles en fronteras sean exhaustivos, aumentando al máximo el tanto por cierto de las partidas analizadas y que, a su vez, los resultados sean inmediatos, sin que ningún producto pueda salir al mercado español y europeo sin garantía de seguridad alimentaria, impidiendo así que los productos contaminados lleguen al consumidor.
COAG DENUNCIA QUE LA UE Y EL GOBIERNO DE ESPAÑA SON CÓMPLICES
Para COAG, «la Unión Europea (UE) y el Gobierno español están siendo cómplices de un grave atentado contra la salud pública, que solo obedece a un puro interés especulativo, mirando para otro lado y permitiendo que entren productos infectados y con altos niveles de residuos químicos al no imponer controles exhaustivos en frontera».
Por último, esta organización agraria hace un llamamiento a las organizaciones de consumidores, para que también pidan responsabilidades con este problema de seguridad alimentaria, ya que los consumidores tienen el derecho a saber qué están comprando.
En este sentido, COAG quiere hacer hincapié en la necesidad de mirar las etiquetas de los productos para conocer el origen de los mismos, ya que «la única garantía que existe es la de los productos de nuestros agricultores y ganaderos, productos españoles, a los que las alertas de las importaciones también hacen daño, pero es necesario y responsable denunciar lo que está ocurriendo».