La recién nombrada presidenta del Consejo de Estado y exvicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, ha advertido de que los disfraces de lencería que llevaban algunas niñas en el Carnaval de Torrevieja son producto de una «frivolidad peligrosa».
Así se ha pronunciado Calvo, este jueves, en una entrevista en Antena 3, preguntada por los disfraces «hipersexualizados» que se han podido ver en el carnaval de Torrevieja.
«Vivimos en un mundo hipersexualizado, donde todo pasa por la belleza y el canon. Es un mercado tremendo, donde se compra y se vende todo y donde parece que hay barra libre para que todo nos parezca bien. Esa idea brutal que yo no comparto de si el mercado lo tiene, se compra y se vende, lo damos por bueno. Yo no doy por bueno esta idea. Y esto es producto de esta especie de frivolidad peligrosa en la que, bueno, no importa nada, es una pésima imagen», ha declarado Calvo.
Por otro lado, Carmen Calvo espera que «muy pronto» se aborde la ilegalidad de la prostitución porque no ve «que sea compatible un estado de derecho con que los prostíbulos estén abiertos y las mujeres estén traficadas» y sean consideradas «mercancía» y «carne para el uso de otro que paga».
«Eso es contrario a los derechos humanos. El feminismo en el que yo ando está en los derechos humanos y niega por tanto que la prostitución sea un trabajo», ha subrayado, añadiendo que no es «el oficio más grande del mundo» sino «la esclavitud más antigua».
NO ENTIENDE A LAS REGULACIONISTAS DE LA PROSTITUCIÓN
En este sentido, Calvo ha criticado a aquellos que apuestan por la regulación de la prostitución. «Yo nunca entenderé a las regulacionistas porque además ellas hablan de la libertad de las mujeres», ha precisado. Por el contrario, a su juicio, «la inmensa mayoría de las mujeres que están en la prostitución están desde la pobreza, desde la desesperación».
«Yo no hablo de la libertad de las mujeres, las mujeres son libres para hacer con su cuerpo lo que quieran. Yo hablo de esa situación terrible que está en todo el mundo y que crece. Mire usted, España tiene el doble de prostíbulos que Alemania y la mitad de la población que Alemania. Esto lo tenemos que mirar», ha apuntado.
En esta línea, ha advertido de un «problema importante» que consiste en que «los chicos se educan en la pornografía y admiten cosas inadmisibles».
También ha alertado de ese 44% de hombres que, según el CIS, creen que se les discrimina a ellos, un dato que, según Calvo, se refiere «mayoritariamente» a «varones jóvenes de ultraderecha» que «se resisten a perder los privilegios», que «les parece bien una pareja si son heterosexuales con sueldo y con todas las ventajas que tienen –compartir el sueldo y que ella sea autosuficiente– pero que exige por otro lado los estereotipos de siempre incluido el de poder ir a un prostíbulo».
«Diríamos que los chicos jóvenes ya no irían a la prostitución, que eso formaba parte de un esquema caduco. Mentira, van muchísimos jóvenes a la prostitución. Dijimos, ya no habrá tanta violencia, los hombres jóvenes respetarán a las mujeres. Mentira. Es decir, estamos en el principio del desmontaje del patriarcado», ha insistido.
En todo caso, Calvo ha indicado que «hay que estar un poco mal de la cabeza para pensar que se van a levantar milenios de patriarcado, en el que las mujeres han estado sometidas y ninguneadas» en «40» años.
SOBRE ZORRA: SOLO LA RAE PUEDE RESIGNIFICAR UN TÉRMINO
Preguntada por la canción ‘Zorra’, que representará a España en el festival de Eurovisión y, en concreto, por quienes dicen que es una resignificación del término, Calvo ha precisado que «resignificar una palabra requiere un esfuerzo importante que pasa porque la Real Academia Española de la Lengua, en el diccionario, tome decisiones».
«Esto no se resignifica en un festival de canción, ni en Eurovisión. Eso es una tontada y una frivolidad pensar eso. No es así. De hecho hay muchas mujeres que la palabra última que escuchan antes de ser agredidas es ‘zorra'», ha avisado, insistiendo en que lo que se quiere con esta canción es «tener votos y ganar dinero».
«Lo que no podemos es tomarnos en serio que con una canción de estas vamos a mejorar lo que le ocurre a las mujeres. Esto es un poco tonto. Y yo creo que es frívolo, pero de todas maneras yo creo que esta cuestión la zanja la propia cantante cuando dice: ‘A mí todo esto me da igual. Yo lo que quiero es ganar Eurovisión'», ha zanjado.