La ministra de Educación, Formación Profesional y Deportes, Pilar Alegría, ha encontrado un nuevo frente de críticas por parte de los consejeros de Educación del Partido Popular, quienes la señalan como objetivo principal de sus descontentos. Los elegidos por Alberto Núñez Feijóo para supervisar la Educación en las Comunidades Autónomas gobernadas por el PP expresan su desaprobación, argumentando que la ministra socialista está desviando su atención hacia cuestiones menos prioritarias.
La crítica se centra particularmente en la supuesta obsesión de Alegría por la regulación del uso de teléfonos móviles en los centros educativos. Los consejeros del PP sostienen que la ministra debería centrarse en asuntos más relevantes y apremiantes, como el desempeño educativo de España en el Informe PISA.
EXCUSAS DE LOS CONSEJEROS DEL PP PARA JUSTIFICAR UN POSIBLE DESPLANTE A PILAR ALEGRÍA
La convocatoria de Pilar Alegría, ministra de Educación, Formación Profesional y Deportes, para discutir la regulación del uso de móviles en las aulas españolas ha suscitado un posible desplante por parte de los consejeros de Educación del Partido Popular. Aunque la ministra propuso un encuentro informal, algunos consejeros ya han presentado excusas, justificando su ausencia con argumentos diversos.
Alegría había comunicado a los presentes en la última sectorial la convocatoria de una reunión informal para abordar la regulación del uso de teléfonos móviles en las aulas, incluso sugiriendo la posibilidad de tratar el tema de forma distendida durante una comida. Sin embargo, la respuesta de los consejeros del PP ha sido poco entusiasta, según informa el diario LA RAZÓN. Argumentan que ya tienen regulado el empleo de los móviles en sus respectivas Comunidades Autónomas, y, por lo tanto, ven innecesaria su presencia en la cita recomendada por Alegría.
Desde Madrid, el consejero de Educación madrileño, Emilio Viciana, se excusó por motivos de agenda, alegando que coincidía con el Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid. En su lugar, asistirá su viceconsejero. Rocío Lucas, titular de Educación en el Gobierno de Castilla y León, no estará presente, enviando en su representación a un director general sin proporcionar una explicación específica.
En el caso de Andalucía, el secretario general de Educación, Javier Fernández, participará de forma telemática. «Andalucía ya ha prohibido el uso de los móviles en los centros educativos en horario lectivo, incluido recreos, comedor escolar y extraescolares, con excepciones de uso pedagógico y enviamos a los centros instrucciones en el mes de diciembre», han argumentado fuentes de la consejería andaluza al diario LA RAZÓN.
El consejero valenciano, José Antonio Rovira, justificó su desplante a la ministra de Educación señalando que habían solicitado la convocatoria de una sectorial para abordar la problemática del sistema educativo español y los datos del informe PISA. Rovira acusó a Pilar Alegría de desviar la atención al convocar una reunión informal sobre el tema de los móviles, el cual considera que no debería tener un matiz político en su regulación. La situación revela tensiones entre la ministra y los consejeros del PP, quienes buscan centrar la atención en temas que consideran más prioritarios.
TODOS LOS CONSEJEROS ACUDEN A LA CITA DE PILAR ALEGRÍA
A pesar de sus iniciales resistencias, todos los consejeros de Educación afiliados al Partido Popular han terminado agachando la cabeza y han acudido a la reunión convocada por Pilar Alegría, la ministra de Educación, Formación Profesional y Deporte. No obstante, su participación estuvo marcada por un tono más beligerante, acusando al Ministerio de Educación de engaño.
Según informa El Mundo, fuentes de la Conselleria de Educación de Galicia alegan que el Ministerio tendió «una trampa política». Argumentan que la convocatoria en diciembre para abordar la cotización de prácticas derivó en discusiones sobre temas secundarios, mientras que el Gobierno anunciaba un plan de Matemáticas y Lectura sin previo aviso a las comunidades. La queja se extiende a la convocatoria de la Comisión Permanente del Consejo Escolar del Estado, a la cual no fueron convocados los consejos escolares autonómicos, generando críticas por «instrumentalización» política.
Desde la Consejería de Educación de Murcia, Víctor Marín sostiene al citado medio que el Ministerio intenta aprovechar el trabajo realizado por las administraciones autonómicas gobernadas por el PP para construir una postura nacional. Marín señala que, a pesar de haber solicitado una reunión monográfica para abordar los resultados en PISA, no han recibido respuesta. El consejero de Educación de la región agrega que los gobiernos autonómicos del PP abordan la educación con «seriedad, responsabilidad y rigor», a diferencia del gobierno central, al que acusa de actuar por oportunismo y rédito político.
Hasta la fecha, Andalucía, Cantabria, Canarias, Castilla La Mancha, Madrid, Galicia, Murcia y Castilla-León ya cuentan en sus sistemas educativos con una regulación sobre el uso de los teléfonos móviles muy parecida
Mientras, en la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid, simplemente afirman al citado medio de tener el uso del móvil ya regulado. En Canarias, también se resisten a respaldar el acuerdo del Ministerio y se remiten a la instrucción anunciada por el consejero del PP, Hipólito Suárez, de limitar el uso en todas las etapas obligatorias.
Fuentes del PP nacional subrayan que la reunión no constituye una Conferencia Sectorial formal, sino un encuentro informal donde la ministra presentó medidas que, según ellos, ya están en práctica desde hace años. Explican que no se oponen a la prohibición en sí, pero sugieren que la foto de familia tendrá que esperar hasta que se convoque una Conferencia Sectorial en condiciones, una posibilidad que no se vislumbra en los próximos días.
ASÍ QUEDA LA REGULACIÓN DE LOS MÓVILES SEGÚN EL ÚLTIMO INFORME
Desde el Consejo Escolar del Estado, el órgano de participación de los sectores más directamente relacionados con el mundo educativo, aprobaron un documento en el que se recogía su opinión sobre cómo debía ser la regulación del teléfono móvil en los centros educativos españoles para darles un uso más responsable.
Según el informe del Consejo Escolar del Estado, en Primaria se mantiene que en esta etapa escolar no es necesario llevar móvil al colegio. Mientras que en la Educación Secundaria, no prohíben a los alumnos llevarlo, pero sí que recomiendan vetar su uso durante las horas de clase. Por otro lado, en el caso de las etapas no obligatorias, como los grados universitarios, Formación Profesional, el Bachillerato y demás, el asunto queda en manos de la dirección del centro.
Hasta la fecha, Andalucía, Cantabria, Canarias, Castilla La Mancha, Madrid, Galicia, Murcia y Castilla-León ya cuentan en sus sistemas educativos con una regulación sobre el uso de los teléfonos móviles muy parecida. Todos ellos bajo el mando del Partido Popular.
