Renfe irá aumentando sus servicios de transporte en tren en función de la evolución de la demanda, según aseguró el ministro de Transportes y Movilidad, José Luis Ábalos.
«Lo que no va a hacer la compañía ferroviaria pública es sacar trenes vacíos y sin viajeros», aseguró el ministro durante su intervención en el pleno de control al Gobierno en el Senado.
Renfe puso en servicio el pasado 22 de junio, una vez decayó el estado de alarma y la restricción a la movilidad, una oferta de trenes que supone poner en circulación 98 trenes diarios que suman unas 30.000 plazas.
Esta oferta es un 50% superior a la que se mantuvo durante el confinamiento, si bien aún es un tercio respecto a la que venía prestando antes de la crisis, cuando cada día ponía en servicio 330 trenes.
Ábalos aseguró que la operadora pública irá aumentando la oferta con la que estrenó la ‘nueva normalidad’ a «un ritmo acomodado a la demanda».
A ello vinculó también el ministro la eventual recuperación de la prestación de los servicios a los viajeros a bordo de los trenes, entre ellos los de restauración. «A medida que haya más trenes y se den más servicios se necesitarán más trabajadores para atenderles», indicó.
En este sentido, se refirió al contrato de prestación de servicios a bordo que Renfe tiene con Ferrovial, que vencía el pasado mes de abril y que se prorrogó esta finales de año, para asegurar que «se implicó personalmente en la negociación» para que se diera esa prórroga y los 2.000 empleados en este servicio «no perdieran su empleo en mitad del confinamiento».