Euskal Herria Bildu ha roto el techo histórico abertzale en votos e influencia, curiosamente más en Madrid y Navarra que en Euskadi, donde el pacto PNV-PSE sigue inalterable en las principales instituciones autonómicas, provinciales y municipales.
Algunas encuestas pronostican la victoria en las próximas elecciones autonómicas vascas de la coalición dirigida por Arnaldo Otegi, que ha propulsado al joven Pello Otxandiano como candidato abertzale.
Pero la familia de la izquierda nacionalista independentista se está resquebrajando tras décadas de unión por el nacimiento del partido Euskal Herriko Kontseilu Sozialista (EHKS), que es una nueva organización con la que pretenden «conseguir que el comunismo sea hegemónico entre los trabajadores».
EHKS nace desde el sindicato estudiantil Ikasle Abertzaleak, que hace 6 años rompió con la rama juvenil de EH Bildu (Ernai) por su giro pragmático ante dirigentes socialistas como Pedro Sánchez o María Chivite.
SIETE CLAVES DE EHKS PARA BATALLAR CONTRA BILDU
EHKS se presentó hace unos días en Eibar denunciando «el recrudecimiento de las condiciones de vida y la miseria de la clase trabajadora, la OTAN y el aumento de las guerras, el autoritarismo del Estado y el fascismo, la destrucción de los ecosistemas, la represión de las mujeres trabajadoras, el derecho de autodeterminación de la clase trabajadora de Euskal Herria (incluido la supervivencia del euskera) y la amnistía de los militantes políticos revolucionarios».
Sus portavoces Ander Goiatxe y Ane Ibarzabal afirman que «la crisis capitalista» resulta una oportunidad para «convertir el comunismo en hegemónico». «Socialismo o barbarie capitalista. No hay posibilida de de vías intermedias», reivindican, denunciando el aburguesamiento de los de Otegi.
EHKS, apuntan «no seguirá el modelo de los partidos políticos profesionales», ya que «su deber, como lo ha sido hasta ahora, consistirá en ofrecer herramientas políticas a la clase trabajadora para que cada vez más gente se una a la organización socialista».
GKS SE HERMANA CON EHKS, ALEJADOS DE OTEGI
EHKS nace hermanada con GKS, que se creó porque, según este segundo movimiento, se mezclaron «la crisis capitalista y el cambio de rumbo de la izquierda abertzale. Es decir, en un proceso en el que la crisis capitalista ha abonado el terreno para la proletarización y donde la izquierda abertzale se ha constituido como partido estatal que defiende prioritariamente los intereses de una parte de la clase media, situándose como punto de apoyo del PNV y del orden institucional».
«La proletarización ha contribuido en la emergencia de la conciencia de clase en ciertos sectores de la sociedad vasca, especialmente en los hijos e hijas del proletariado y de la aristocracia obrera del anterior ciclo político, y ha vuelto a reavivar el interés político sobre la estrategia socialista del proletariado. Este planteamiento no tiene encaje alguno dentro del nuevo paradigma político de la izquierda abertzale, por lo que, el movimiento socialista ha tenido que hacer el camino por su cuenta», añadían.
GKS aseguró que ven «que la estructuración institucional de la izquierda abertzale en Sortu-EH Bildu ha generado un bloqueo político, puesto que ella y todo el universo que le rodea presiona y reacciona sobre la voluntad socialista de construir un movimiento político independiente de clase, mientras que el proceso de proletarización sigue haciendo mella en el conjunto de la clase trabajadora».