sábado, 23 noviembre 2024

Marta Lois (Sumar) estudia eliminar la casilla de la Iglesia de la declaración

El partido liderado por Yolanda Díaz, Sumar, continúa generando controversias, esta vez con un enfoque hacia la Iglesia. La portavoz de Sumar en el Congreso de los Diputados, Marta Lois, ha confirmado a Europa Press durante una entrevista la intención del partido de abrir un debate en el Congreso sobre la eliminación de la casilla en la declaración de la renta, que permite a los contribuyentes destinar el 0,7% del IRPF al sostenimiento económico de la Iglesia.

En sus declaraciones, Marta Lois expresó que desde Sumar impulsarán la valoración y el debate exhaustivo en el Congreso sobre la posible eliminación de esta casilla, cuestionando la pertinencia de su existencia en las declaraciones de impuestos. Este posicionamiento de Sumar en relación con la Iglesia surge pocos días después de que se revelara que la institución religiosa logró batir su récord de recaudaciones durante el año 2022.

La propuesta de Sumar plantea un nuevo frente de discusión en el ámbito político y social, avivando el debate sobre la financiación de la Iglesia a través de la declaración de la renta y sus implicaciones en el apoyo económico a otras áreas. Este desarrollo sigue la línea de otras acciones polémicas que ha emprendido Sumar, consolidando su posición como un partido que no teme abordar temas controvertidos en la arena política española.

LOS DATOS QUE NO GUSTAN A MARTA LOIS NI A SUMAR

Marta Lois (Sumar) estudia eliminar la casilla de la Iglesia de la declaración | Foto: Europa Press
Marta Lois (Sumar) estudia eliminar la casilla de la Iglesia de la declaración | Foto: Europa Press

La Iglesia Católica en España ha logrado un hito significativo en la última campaña de la Renta correspondiente al ejercicio fiscal de 2022, recaudando un total de 358,8 millones de euros, un 11,9% más que el ejercicio anterior, según datos provisionales publicados por la Conferencia Episcopal Española (CEE). Este dinero, derivado del 0,7% del IRPF destinado a la Iglesia, representa un nuevo récord y evidencia la generosidad de los contribuyentes hacia la institución religiosa.

Estos fondos desempeñan un papel esencial en el sostenimiento de diversas iniciativas benéficas lideradas por la Iglesia en España. Las 11.396 parroquias en todo el país se benefician de estos recursos para atender a personas en situación de vulnerabilidad, incluyendo a los ancianos, discapacitados y enfermos. La Iglesia también muestra su compromiso social a través de la atención a presos, con 170 capellanes y 2.526 voluntarios dedicados a tareas sociales, espirituales y jurídicas.

Marta Lois expresó que desde Sumar impulsarán la valoración y el debate exhaustivo en el Congreso sobre la posible eliminación de esta casilla

Aunque la propuesta de Sumar para eliminar la casilla de la Iglesia en la declaración de la renta ha generado controversias, informes especializados, como el de la consultora KPMG, defienden el mantenimiento de esta casilla, tal y como adelante el medio digital El Debate. Según KPMG, por cada euro que la Agencia Tributaria ingresa a la Iglesia, esta invierte 1,38 euros en la sociedad, lo que equivale al 138%, explica el citado medio.

La historia de esta casilla se remonta a 1979, año en que España y la Santa Sede firmaron el Acuerdo sobre Asuntos Económicos. En 1988, se implementó el sistema de asignación tributaria, permitiendo a los contribuyentes marcar la casilla de la declaración de la renta destinada a la Iglesia Católica, estableciendo así una tradición arraigada en el ámbito fiscal español.

EN PELIGRO LA LABOR SOCIAL DE LA IGLESIA SEGÚN LAS DECLARACIONES DE MARTA LOIS

Marta Lois (Sumar) estudia eliminar la casilla de la Iglesia de la declaración | Foto: Europa Press
Marta Lois (Sumar) estudia eliminar la casilla de la Iglesia de la declaración | Foto: Europa Press

La propuesta de Sumar, que ha comentado Marta Lois, de eliminar la casilla de la Iglesia en la declaración de la renta ha generado inquietud en diversos sectores. La medida podría significar la pérdida de una fuente crucial de financiamiento para la Iglesia Católica, que desempeña un papel fundamental en la atención a millones de personas desfavorecidas en España.

Según la última memoria de actividades de la Iglesia Católica, su labor social ha contribuido a crear «una sociedad mejor», llegando a ayudar a 3.778.740 personas al año. Estos individuos fueron acompañados y atendidos en alguno de los 8.796 centros sociales y asistenciales católicos durante el año 2022, según informa El Debate.

Entre estos centros se incluyen diócesis, parroquias, congregaciones religiosas, Cáritas y otras asociaciones vinculadas a la Iglesia. La expansión de estos centros ha sido notable, con 3.459 más que en 2010, y funcionan en gran medida gracias a las donaciones de la declaración de la renta y al trabajo desinteresado de miles de voluntarios en comedores sociales, casas de acogida, centros de menores, residencias para personas mayores, ambulatorios, hospitales, centros para la promoción de la mujer y víctimas de violencia, entre otros.

Marta Lois (Sumar) estudia eliminar la casilla de la Iglesia de la declaración | Foto: Europa Press
Marta Lois (Sumar) estudia eliminar la casilla de la Iglesia de la declaración | Foto: Europa Press

La Iglesia, respaldada por las contribuciones de los ciudadanos, no se limita únicamente a servicios sociosanitarios. Durante 2022, más de dos millones de personas se beneficiaron de los más de 6.100 centros que la Iglesia gestiona para mitigar la pobreza entre los más vulnerables de España.

Además, la Iglesia cuenta con 386 centros para promover el empleo, beneficiando a 155.906 personas. Según la información proporcionada por la Iglesia española, esta atención sigue siendo una de las más solicitadas, solo superada por las necesidades básicas de alimentación y vivienda. También se destaca que 90.214 inmigrantes fueron atendidos en 119 centros de acogida y más de 74.000 familias recibieron apoyo en los centros para la defensa de la vida.

Sin duda, la propuesta de Sumar plantea un desafío para la Iglesia, y abre una nueva guerra en el Gobierno de coalición, que ha utilizado estos fondos desde 1979 para brindar asistencia a un amplio espectro de la población española. La decisión final sobre la eliminación de la casilla de la Iglesia en la declaración de la renta podría tener consecuencias significativas para la capacidad de la Iglesia para llevar a cabo sus actividades benéficas y de ayuda social.