El portavoz de Esquerra Republicana (ERC) en el Congreso, Gabriel Rufián, ha negado que haya habido una ruptura de la unidad independentista por el suplicatorio de su homóloga de Junts, Laura Borràs, y cree que ella podría haber evitado la intervención del Tribunal Supremo renunciando a su acta de diputada.
En rueda de prensa en el Congreso, Rufián se ha defendido así de la crítica vertida por la propia Borràs contra la decisión de ERC de no participar en la votación de su suplicatorio que el Congreso previsiblemente aprobará este jueves. «A la represión se la combate, no se le permite vencer por incomparecencia del rival», ha comentado la independentista catalana.
Frente a esto, el dirigente de ERC ha comenzado diciendo que su partido no es culpable de la decisión que afecta a Borràs y que si alguien depende su suplicatorio no es de los republicanos catalanes, como tampoco de la CUP o de Bildu –que tampoco van a participar en la votación–, sino de los del PSOE, con el que, según ha recordado, Junts gobierna en la Diputación de Barcelona. «Tenían campo para negociar y no lo han hecho», ha apuntado.
NO SE PUEDE SER MÁS LAXO CON LOS DE FUERA
Además, ha subrayado que si Borràs hubiese sido un cargo electo de ERC, «todo el mundo sabe» que este suplicatorio ni siquiera se habría llegado a debatir porque la afectada tendría que haber dimitido.
«Tenemos unos códigos internos que nos impiden ser más laxos con los que fuera que con los de dentro. Es pura coherencia», ha dicho el diputado catalán, para añadir que ERC tiene «90 años de historia impoluta» y que «nadie» les va a dar «lecciones» en este país de lo que supone ser «independentista» ni «republicano».
«No debe haber ninguna sombra de duda en cuanto a la corrupción o irregularidades administrativas en el independentismo», ha proclamado Rufián, incidiendo en que «la única persona» que pudo evitar que este asunto llegase al Supremo es Borràs abandonando su escaño en el Palacio de la Carrera de San Jerónimo, un gesto que ha dicho que vienen pidiéndole «desde hace días» en diferentes negociaciones.
También desde la CUP han lamentado que Borràs no haya accedido a dejar el escaño puesto que esa era, a su juicio, la mejor opción para defender su derechos y también para mantener una posición «digna y solidaria con el conjunto del independentismo».
¿LA CONCIENCIA? BASTANTE BIEN
Rufián, que ha dicho tener la conciencia «bastante bien», ha querido dejar claro que para ERC el procedimiento que se ha seguido contra Borràs, además de «viciado», es «tóxico» e «injusto», y que participar en la votación de su suplicatorio era «legitimarlo».
Eso sí, ha recalcado que la decisión de ERC de no participar, pactada con otros partidos independentistas como la CUP y Bildu, fue una propuesta de Junts, aunque luego la formación que lidera Carles Puigdemont rectificó y la vio insuficiente.
«Ellos nos propusieron no participar y, después de unos días les dijimos que sí. Pero, de repente, a Junts no le valía –ha relatado–. Es perfectamente y quizá entendible, viendo que son diferentes familias en el espacio Covergència».
Preguntado sobre si el suplicatorio Borràs puede suponer una ruptura de la unidad independentista, Rufián ha negado la mayor, apuntando que si no se rompió con el pacto entre Junts y el PSOE para gobernar la Diputación de Barcelona, «es complicado» que se rompa ahora con una votación en el Congreso.