La portavoz de Junts en el Congreso, Laura Borràs, ha acusado este jueves a PSOE, PP, Vox y Ciudadanos de anteponer «la patria a la democracia» al apoyar el suplicatorio que ha solicitado el Tribunal Supremo para poder investigarla en lo que, a su juicio, es «un atropello» a sus derechos.
Así se ha pronunciado Borràs, en declaraciones en el Congreso después de que el Pleno discutiera, a puerta cerrada como establece el Reglamento, el dictamen de la Comisión del Estatuto de los Diputados favorable a despojarla de su fuero parlamentario para que el Supremo determine si incurrió en delitos de fraude a la Administración, malversación de caudales públicos y falsedad documental en su etapa de directora de la Institució de les Lletres Catalanes (ILC).
El dictamen se votará este jueves por la tarde, pero Borràs ya ha dado por hecho que saldrá adelante porque muchos de sus compañeros han decidido teniendo en cuenta sólo la «presunción de culpabilidad» y sin defender sus derechos que, ha dicho, «también son los suyos», porque cualquier día podría verse en la misma tesitura.
La diputada de Junts ha puesto de relieve que los diputados que van a votar de forma telemática, la mitad de la Cámara, no han podido escuchar sus explicaciones y se van a pronunciar a ciegas. Por eso, este miércoles envió un correo electrónico a todos ellos exponiendo la posición que ha defendido en el hemiciclo.
15 AÑOS DE CÁRCEL
Escoltada por el resto de su grupo parlamentario, del que va a seguir ejerciendo como portavoz pese a la investigación del Supremo, ha insistido en que es inocente de los cuatro delitos de los que se le acusa y por los que se le piden 15 años de cárcel.
Borràs ha denunciado que la mayoría del Congreso tenía su voto «decidido de antemano». «La unidad de España justifica cualquier medio aunque el precio sea resquebrajar la democracia», ha proclamado. «Van a atropellar mis derechos. Anteponer a patria a la democracia conlleva estos peajes y espero que su conciencia lo resista», ha añadido.
También ha agradecido a sus compañeros de Junts y a los del PNV, que van a rechazar el suplicatorio, que hayan «preservado el espíritu democrático» de la Cámara y la «presunción de inocencia».»A la represión se la combate, no se le permite vencer por incomparecencia del rival, aunque el combate esté perdido de antemano porque hacer lo correcto nunca, nunca, nunca puede ser irrelevante», ha dicho, antes de rehusar opinar sobre la decisión de ERC y la CUP de no participar en la votación.
También Bildu y el BNG tienen previsto levantar las manos cuando se vote el suplicatorio. Para las formaciones que han optado por esta vía, Borràs se ha limitado a expresar su «respeto». «Sabemos lo que teníamos que votar, cada cual decide lo que vota libremente», ha apostillado.
NI ABSUELTA NI CONDENADA POR SER INDEPENDENTISTA
La dirigente independentista ha asegurado que no quiere ser absuelta «por la bandera» que enarbola, pero tampoco «condenada» por las siglas a las que representa. «Tal vez quien vote sí quiera una España cada vez más rojigualda pero les está quedando cada vez más en blando y negro», ha dicho, antes de asegurar que lo único que triunfa con su suplicatorio es «la represión». «Y siempre que triunfa la represión, pierde la democracia», ha abundado.
«Levantarán mi inmunidad, pero no podrán tumbar mi dignidad porque no soy culpable y defiendo con uñas y diente mi inocencia», ha enfatizado, aseverando que ahora es tan «aforada» y «tan independentista» como cuando un juzgado ordinario tramitó la causa que ahora seguirá en el Supremo.
Borràs ha concluido su intervención anunciado que ésta sería última que hablaría de la causa contra ella, ahora que está ‘sub iudice’.