Mónica García, en su debut como ministra de Sanidad, se encuentra ante un desafío inicial al recibir una carta de la consejera de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Fátima Matute. A través de esta correspondencia, Matute se propone comunicar a García las necesidades prioritarias que enfrenta la región en el ámbito sanitario.
La recepción de la carta apenas unos días después de su nombramiento no es casualidad. Más bien, es un indicativo de que desde la región madrileña, bajo el liderazgo de Isabel Díaz Ayunos, no se facilitaran las cosas a Mónica García ni al Ministerio de Sanidad. Este gesto temprano por parte del Ejecutivo madrileño resalta la probabilidad de un diálogo desafiante entre ambas administraciones, marcando el tono para futuras interacciones en el ámbito de la salud pública.
MADRID EXIGIRÁ A MÓNICA GARCÍA TRABAJAR EN TEMAS OLVIDADOS EN LA REGIÓN
El objetivo de la carta de Fátima Matute a la ministra de Sanidad, Mónica García, es paliar la falta de profesionales en el Sistema Nacional de Salud y también mejorar la accesibilidad a los medicamentos, reduciendo a su vez los tiempos de espera administrativos para su aprobación.
Mónica García «recibirá una carta desde esta Consejería, donde desde luego le exigiremos que empiece a trabajar en cosas que han estado dormidas tras seis ministros y que desde luego nos ocupan y nos preocupan», comentó Matute ante los medios de comunicación después de reunirse con la Confederación Empresarial de Madrid (CEIM-CEOE). El anuncio de Matute, coincidió en el momento que Mónica García juraba el cargo de ministra de Sanidad.
Le exigiremos que empiece a trabajar en cosas que han estado dormidas tras seis ministros y que desde luego nos ocupan y nos preocupan
Fátima Matute, consejera de Sanidad de la Comunidad de Madrid
Por otro lado, la consejera de Sanidad de la región mencionó la necesidad de un Plan Nacional de Recursos Humanos ante la continuada «falta de profesionales de todas las categorías de médicos, enfermeras especialistas, de psicólogos clínicos». «Es necesario que desde el Ministerio de Sanidad se actúe cuanto antes porque se tarda una media de 10 años en formar a un profesional sanitario desde que ingresa en la Universidad», cita la carta de Matute.
La situación es especialmente preocupante en Atención Primaria, donde hay más escasez de personal sanitario. Desde la Comunidad de Madrid «hemos puesto en marcha batería de mejoras salarias y organizativas, además de ofrecer contratos de tres años de duración a los MIR que finalizaron su residencia en mayo», apunta el escrito.
Además, destaca en su carta la necesidad de agilizar los trámites administrativos para aprobar nuevos medicamentos. «No es de recibo que haya medicamentos que tardan más de 600 días en autorizarse», señala Fátima Matute. La falta de aprobación de medicamentos «está causando un grave perjuicio a los pacientes que esperan estos tratamientos, pero también los propios hospitales que son los que han puesto en marcha los ensayos clínicos», explica Matute.
En el encuentro en el CEIM, la consejera de Sanidad de Madrid respaldó la colaboración público-privada en áreas específicas. Era plenamente consciente de que sus afirmaciones serían objeto de críticas por parte del nuevo equipo ministerial encabezado por Más Madrid. Este posicionamiento público revela una clara divergencia de enfoques entre las administraciones y anticipa posibles tensiones en el diálogo entre ambas partes en el ámbito sanitario.
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FÁTIMA MATUTE VE COMO «DESGRACIA» QUE MÓNICA GARCÍA SE QUEDE CON SANIDAD
La Consejera de Sanidad afirmó ante los medios que «es una desgracia que la sanidad quede en manos de la ultraizquierda». Asimismo, hizo hincapié en que la Comunidad de Madrid carece de la competencia necesaria para agilizar los trámites administrativos vinculados a la aprobación de medicamentos.
Señaló que esta responsabilidad recae en el Ministerio de Sanidad y, actualmente, en manos de Mónica García, quien deberá liderar los esfuerzos para implementar cambios en este aspecto. «Esa competencia nosotros no la tenemos transferida y, desde luego, nuestra voz y nuestra insistencia va a estar ahí y desde luego, también la voz de las asociaciones de pacientes, que también es muy importante, en mejorar no solo la salud, sino esa accesibilidad al medicamento», explicó Matute.
En este aspecto, la consejera madrileña de Sanidad aseguró que colaborará con la industria farmacéutica y el colegio de farmacéuticos trabajarán para mejorar «ese acceso a los medicamentos».
EL PACTO DE ESTADO DE SALUD MENTAL, ASÍ LO VE FÁTIMA MATUTE
Durante el debate de investidura de la pasada semana, Pedro Sánchez anunció la idea de un Plan de Estado de Salud Mental. Sin embargo, desde la Comunidad de Madrid no lo ven con buenos ojos y afirman que es una copia del plan madrileño. Es «clavado el programa de Salud Mental que tiene la Comunidad de Madrid».
«Qué bien lo estamos haciendo en Madrid porque nos ha clavado nuestro programa. Los deberes los tenemos hechos y hay que seguir haciéndolos porque somos los eternos estudiantes, yo aprendo todos los días y estudio todos los días y, desde luego, en la Comunidad de Madrid los deberes están hechos. Hemos apostado por un Plan de Salud Mental muy potente en la Comunidad de Madrid», declaró Fátima Matute.
FÁTIMA MATUTE YA OPINÓ SOBRE EL FUTURO DE MÓNICA GARCÍA EN SANIDAD
Por otro lado, es relevante señalar que Fátima Matute fue una de las últimas en manifestar su total disposición para colaborar con Mónica García en caso de que está fuera designada como ministra de Sanidad. Aunque este evento finalmente tuvo lugar, las declaraciones previas en el texto indican que la colaboración entre Matute y García será más tensa de lo inicialmente expresado por la consejera de Sanidad.
Además, Matute le recomendó a Mónica García que exportase al resto de España el exitoso modelo sanitario que había permitido que la Sanidad Madrileña fuera reconocida como la mejor de Europa.
«Espero que como profesional sanitaria que es y compañera que colabore para mejorar esta sanidad que tenemos y que sepa exportarla al resto de España. Con lo cual, colaboración absoluta y todos los mensajes e ‘inputs’ que tendremos que darles, se lo daremos con toda la elegancia y con todas las ganas de ayudar posibles», comentó en su día Fátima Matute.