Bruselas hunde el último bulo sobre la amnistía. «Contrariamente a lo que se informa, la Comisión no dispone de una evaluación preliminar del proyecto de ley de amnistía presentado al Parlamento español». Así de rotunda se ha mostrado la oficina de Ursula von der Leyen para desmentir de forma tajante un supuesto análisis preliminar que aceptaba la amnistía y permitía su tramitación sin obstrucción alguna al no contemplarse delitos de blaqueo de capitales ni falsedad documental.
«La Comisión ha recibido este martes el proyecto de ley de las autoridades españolas y acaba de iniciar su análisis», ha afirmado Eric Mamer, portavoz de la presidenta de la Comisión Europea.
El supuesto análisis preliminar afirma que la ley de amnistía había excluido «expresamente» los casos denominados y englobados en el ‘lawfare’. Esta supuesta guerra judicial, no obstante, sí está incluida en la normativa al señalar que serán beneficiados con la amnistía «los actos cometidos con la intención de reivindicar, promover o procurar la secesión o independencia de Cataluña, así como los que hubieran contribuido a la consecución de tales propósitos».
En todo caso, continúa la norma, serán amnistiados «los delitos de usurpación de funciones públicas o de malversación (…) directamente o a través de cualquier entidad pública o privada, así como cualquier otro acto tipificado como delito que tuviere idéntica finalidad». También las actuaciones «a título personal o institucional, con el fin de divulgar el proyecto independentista, recabar información y adquirir conocimiento sobre experiencias similares o lograr que otras entidades públicas o privadas prestaran su apoyo a la consecución de la independencia de Cataluña».
BRUSELAS PIDE MÁS INFORMACIÓN AL GOBIERNO SOBRE LA AMNISTÍA
«Asimismo, se entenderán comprendidos aquellos actos, vinculados directa o indirectamente al denominado proceso independentista desarrollado en Cataluña o a sus líderes en el marco de ese proceso, y realizados por quienes, de forma manifiesta y constatada, hubieran prestado asistencia, colaboración, asesoramiento de cualquier tipo, representación, protección o seguridad a los responsables de las conductas a las que se refiere el primer párrafo de esta letra, o hubieran recabado información a estos efectos», destaca la normativa.
La propuesta de la Ley de Amnistía es un asunto predominantemente doméstico
Todos estos casos están bajo investigación judicial, pero en la supuesta evaluación preliminar, la Comisión Europea, no ve «contradicciones con los principios y normas comunitarios». De esta forma, el falso análisis mostraba a una Bruselas equidistante, como lavándose las manos, porque ninguna de las partidas de los fondos europeos ha ido destinada a sufragar los gastos de los independentistas para poder realizar sus acciones contra el Estado de Derecho.
De esta forma, Bruselas dejaba en manos de España la propia amnistía. «La propuesta de la Ley de Amnistía es un asunto predominantemente doméstico, cuya evaluación detallada recae en las autoridades nacionales competentes», ha asegurado Bruselas.
BRUSELAS PASA POR ALTO EL LAWFARE AL NO INCLUIR FALSEDAD NI BLANQUEO
La Comisión Europea solo se muestra preocupada por el impacto potencial de la ley de amnistía sobre los «intereses financieros de la UE». A su juicio, la norma no vulnera la separación de poderes a pesar de que los juristas consultados por este medio, así como los jueces del Tribunal Supremo, Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), todas las asociaciones de jueces, todas las de fiscales y la inmensa mayoría de abogados han mostrado su más absoluto rechazo.
Según el falso análisis, los asuntos del ‘lawfare’ no están incluidos y por tanto no hay preocupación alguna, a pesar de que serán amnistiados dirigentes de Junts por casos de corrupción política. Según asegura, ninguno de los amnistiados ha realizado blanqueo de capitales o falsedad documental, pero admite que sí hay usurpación de funciones públicas, malversación, desobediencia, desórdenes públicos o prevaricación. No obstante, Bruselas pasa por alto las investigaciones por terrorismo, en la que están involucrados, entre otros, Puigdemont y los doce independentistas del ‘caso Judas’.
Por estos motivos, la Comisión Europea no intervendría, aunque sí espera una «información adicional de las autoridades españolas para un análisis más detallado». El comisario de Justicia, Didier Reynders, así lo ha exigido al Gobierno español, y la Comisión espera poder realizar un análisis completo basado en todos los elementos relevantes.
BORRELL Y SU SILENCIO SOBRE LA AMNISTÍA: 315.428,88 € ANUALES
Por su parte, Josep Borrell, denominado como el ‘azote del independentismo’, guarda un extraño silencio sobre la ley de amnistía. El Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior ha asegurado que esta ley busca hacer «hacer borrón y cuenta nueva», sin entrar en más detalles.
Asimismo, afirma que las amnistías son el «punto final de una fase de conflicto», pero en España solo se ha aplicado como paso previo a un nuevo régimen político, tal y como señaló el Tribunal Constitucional en 1984.
Borrell fue el ideólogo y promotor de una contraofensiva en Bruselas y otras instituciones internacionales para tumbar el relato del conflicto político, advertir de las consecuencias de la independencia de Cataluña y fue recibido como una estrella en la masiva manifestación de Barcelona en 2017. Ahora, el también exministro de Exteriores no entra a valorar ni da ni un solo detalle sobre la medida de gracia dada Carles Puigdemont, aunque sí mostró una cierta «preocupación» por los acuerdos alcanzados por el PSOE con Junts y ERC.
No obstante, deja su visión al respecto para más adelante, una vez caduque su puesto o sea sustituido, porque en este PSOE primero prevalece la supervivencia de uno mismo antes que velar por los intereses del país.
«Aquí y ahora no es el momento, pero todos los que me conocen y saben mi trayectoria pueden imaginar lo que pienso», se justifica. Es decir, se muestra horrorizado por la a