El último pleno celebrado en la Asamblea de Madrid ha terminado generando ciertas tensiones y nervios entre Más Madrid y el PSOE Madrid. El minuto de silencio que llevó a cabo el partido de Mónica García más la declaración por parte del portavoz del partido socialista madrileño, Juan Lobato, han terminado por abrir una brecha entre la oposición al Gobierno de Isabel Díaz Ayuso.
Juan Lobato, tildó de «mezquino» el comportamiento y la actitud de Más Madrid a la nueva petición de un minuto de silencio que ha realizado Vox durante la última Asamblea. Desde ese momento, se han abierto numerosas hipótesis sobre la relación entre García y Lobato, tanto fuera como dentro de la Cámara.
JUAN LOBATO SE COMPROMETE CON LOS MINUTOS DE SILENCIO Y MARCA DISTANCIA CON MÁS MADRID
Por su parte, fuentes oficiales del partido socialista asegura que desde sus filas no existe ningún tipo de nerviosismo y remiten a este medio las declaraciones realizadas por María de los Llanos durante la última intervención del Grupo Parlamentario Socialista en rueda de prensa. Sin embargo, la tensión se nota en los pasillos de la Asamblea entre los miembros del PSOE madrileño.
«En cuanto al minuto de silencio, nuestro portavoz Juan Lobato siempre ha dicho desde el primer minuto que iba a mostrar siempre su apoyo ante cualquier gesto de condena del horror», comentaba Llanos sobre la posición de Lobato ante los minutos de silencio. «Ante el horror y la barbaridad siempre vamos a mostrar nuestra condena», añadía Llanos.
En lo referente a la relación con Más Madrid, María de los Llanos se mostró más distante, reflejando así el duro momento que están viviendo ambos partidos políticos. «Nosotros somos dos fuerzas políticas y, por tanto, en algunos momentos puede haber alguna coincidencia y en otros momentos puede haber unas diferencias», apuntaba Llanos.
LOBATO Y PSOE MADRID SE ALEJAN DE MÁS MADRID Y ACERCAN POSTURAS CON EL PP DE AYUSO
De acuerdo con fuentes de ambos partidos, la relación actual entre Juan Lobato y Mónica García es «prácticamente nula». Apenas se limita a algún encuentro «cordial» en los pasillos de la Asamblea o en actos institucionales. Una situación que se podría agravar en el caso de que traspasase la barrera regional y llegase a niveles nacionales. Debido a la implicación de Más Madrid con Sumar y todo lo que puede implicar de cara a una futura investidura de Sánchez.
Esta mala relación por parte de Mónica García con Lobato podría suponer en un futuro que la opción de García a ser ministra de Sanidad se convierta en humo. O en el caso de serlo, fuentes del partido socialista aseguran que podrían causar cierto daño al Gobierno de Sánchez. «El salto mediático de ser ministra es un peligro. Si sale bien, se pueden disparar en Madrid», comenta un cargo socialista.
Ambos partidos echan balones fuera sobre sus problemas y ninguno de ellos es capaz de aclarar el desencadenante de su ruptura política.
Esta separación de la izquierda en la Asamblea de Madrid, ha provocado que las relaciones por parte del partido socialista con el partido popular sean más estrechas. «Incluso nuestra relación con Ayuso es más cercana», explican desde el entono de Juan Lobato.
Por otro lado, esta posición de los socialistas, con respecto a su acercamiento al Partido Popular, como su posición con el conflicto israelí, no ha sido vista con buenos ojos por parte del equipo de Mónica García, que ha llegado a decir en los pasillos de la Asamblea que con Gabilondo se podía trabajar bien. «Ahí se podía llegar a acuerdos, había lealtad y una línea común de apretar a la presidenta. Ahora están obsesionados con nosotros. No les interesa competir con Ayuso, su objetivo somos nosotros».
ALBARES DEFIENDE A LOS POLÍTICOS ESPAÑOLES ANTE LA EMBAJADORA ISRAELÍ
Por otro lado, las cosas para Más Madrid no han sido tan malas durante este complicado inicio de semana y todo gracias a la defensa del ministro de Asuntos Exteriores en funciones, José Manuel Albares, que hizo frente a la Embajada de Israel en España tras el comunicado que lanzó en el que acusaba a los miembros del Gobierno español de «alienarse con este terrorismo tipo ISIS». En referencia a los ataques continuados de Hamás contra Israel.
En efecto, unas horas más tarde, el Ministerio de Asuntos Exteriores publicó un comunicado en el que rechazaba de manera enfática las alegaciones falsas contenidas en el comunicado emitido por la Embajada de Israel sobre ciertos miembros del Gobierno, calificando estas acusaciones como «insinuaciones sin fundamento». La respuesta de Exteriores, inusualmente contundente en términos diplomáticos, fue coordinada con La Moncloa, según fuentes del Gobierno.
Aunque ni el comunicado de la Embajada israelí ni el de Exteriores mencionaban explícitamente a ningún miembro del Gobierno, se da por sentado que los señalamientos estaban dirigidos a los representantes de Sumar, Podemos e Izquierda Unida en el Consejo de Ministros. Dando a entender también, que condenaban los testimonios de los grupos políticos allegados a estos. Además de su conversación con la embajadora israelí, Albares también mantuvo un diálogo con la vicepresidenta segunda y líder del ala minoritaria del Gobierno, Yolanda Díaz.
