Dejar de fumar puede ser una meta realmente difícil de alcanzar. En ocasiones, comienza como una costumbre social y otras llega a ser un problema que puede incluso terminar con la muerte del fumador. A pesar de que es de público conocimiento que fumar es malo para la salud, hay persona que comienzan incluso siendo muy jóvenes. Hay medicamentos de venta con receta y apoyo psicológico que pueden utilizarse para llegar al tan ansiado: eliminar de nuestra vida el cigarrillo. No obstante, hay otras formas de descartar esta costumbre. Muy atento/a porque te las vamos a contar todas.
1Dejar de fumar de manera gradual
Dejar de fumar de golpe puede ser misión imposible, pero ¿qué pasa si lo hacemos de forma gradual? No hay una sola manera correcta de dejar el hábito. Mientras algunos tienen la fuerza de voluntad suficiente para arrancar de cuajo esta manía, otros necesitan ir poco a poco. Se trata de ir dejando de fumar durante algunas semanas antes de sacarlo definitivamente. Cada día, el número de cigarrillos se reduce lentamente, así como la cantidad de nicotina en el cuerpo. Esto suena muy bien, pero algunos fumadores lo consideran como una de las maneras más complicadas. Se frustran cuando tienen recaídas y no vuelven a intentarlo.