sábado, 23 noviembre 2024

Díaz avisa al PSOE de que debe mantener las medidas anticrisis: «No vamos a causar dolor ni hacer retroceder al país»

La líder de Sumar, Yolanda Díaz, ha advertido de que el futuro Gobierno de coalición con el PSOE debe mantener las medidas de protección anticrisis qué funcionan, al proclamar que su proyecto no aceptará «recortes» que produzcan «dolor» a la ciudadanía y hagan «retroceder» al país.

De esta forma, ha señalado que no se puede incurrir en «actuaciones incorrectas» y que cualquier revisión debe hacerse con «serenidad», dado que es vital proseguir con las ayudas para bonificar el transporte público y las actuaciones para proteger a las empresas y los trabajadores, incluidas en el denominado ‘escudo social’ frente a los efectos de la crisis provocada por la guerra de Ucrania.

Mientras, ha abogado por suprimir las bonificaciones que impulsó el PSOE para la compra de vivienda para jóvenes y familias, que considera una política infructuosa y acrecienta la especulación en materia de vivienda.

Así lo ha trasladado durante el acto ‘Un proyecto útil para un país mejor’, celebrado en Madrid y en el que Díaz ha mantenido un encuentro con los coordinadores de los grupos de trabajo de Sumar, de cara a actualizar el ideario político de su proyecto.

Una reflexión que llega cuando hay voces como la del gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, quien ha planteado al Gobierno medidas de soporte fiscal «más selectivas» para evitar una subida mayor de la inflación.

Ayer la ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, no entró en detalles sobre el plan presupuestario que enviará en octubre a la Comisión Europea y sobre la continuidad de las ayudas lanzadas por la guerra de Ucrania, cuyo plazo de vigencia es el 31 de octubre.

La vicepresidenta segunda ha desgranado que ahora España está en un momento de «impás» por el intento de investidura «fracasada» del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, y su proyecto político tiene claro que debe conformarse un nuevo Ejecutivo de coalición progresista, pero que también debe ser «mejor» que el anterior tanto en «las formas» como en el «fondo» para ganar derechos.

Durante su intervención, Díaz ha desgranado que «hay incertidumbre» y que Alemania y Países Bajos están en «recesión técnica». En consecuencia, ha desgranado que «con toda la prudencia y por lo que pueda venir y ojalá no venga», el país tiene que estar preparado pero dejando claro que Sumar «tiene sentido sólo para un país que no practique recortes», como ya se demostró el Gobierno en la legislatura pasada.

Luego, ha apuntado que en estos días se está abriendo un debate acerca de si tienen que retirar parte de las medidas de protección social que ya plasmaron

Eso sí, Díaz ha señalado que hay medidas que no funcionan como, por ejemplo, la «bonificación fiscal» de un 15% para la adquisición de viviendas, iniciativa impulsada por el PSOE y que ya criticó en su día. Y es que considera que es un ejemplo de «políticas fracasadas» que solo abundan más en la «especulación».

Sin embargo, ha enfatizado que hay actuaciones en ese ‘escudo social’ «muy eficaces» como la del transporte público, que permite luchar contra el cambio climático y garantiza el derecho a la movilidad.

«Por tanto en este debate pedimos prudencia porque si nos equivocamos podemos hacer retroceder al país. En este sentido, creo que prudencia sí, serenidad también y analicemos las políticas que funcionan y las que no», ha insistido.

Además, ha marcado como el camino a seguir para el futuro Gobierno de coalición la estrategia que adoptó en la pandemia, que sirvió para «salvar el tejido productivo» del país y ganar más derechos laborales.

También ha reivindicado propuestas icónicas de Sumar como reducir la jornada laboral, lanzar una ley para reducir las listas de espera en sanidad y tomar medidas para potenciar la educación pública, pues con la presencia de Sumar la legislatura que viene será «la más social de la historia».

Y es que ha advertido que lo que pasa en Grecia, que define una jornada de hasta 78 horas y hasta seis días de trabajo a la semana, «no es una anécdota» y España debe ser un polo progresista dentro del continente.

«Nunca vemos a la derecha y la extrema derecha movilizarse por estas cosas», ha criticado la vicepresidenta segunda en funciones en alusión a las cuestiones sociales.