En los últimos años, hemos visto un aumento significativo en los delitos informáticos relacionados con el robo de información digital, especialmente el robo de identidad. Los cibercriminales están descubriendo nuevas formas cada día para obtener acceso ilegal a los datos personales de sus víctimas, como contraseñas, números de tarjeta de crédito y direcciones de correo electrónico. Cuando esta información es robada, los delincuentes pueden usarla para fines fraudulentos e incluso para bloquear el acceso a la cuenta de la víctima.
Si bien hay los métodos tradicionales bien conocidos de robo de identidad, como el phishing inalámbrico y la carga de software malicioso, los delincuentes también están desarrollando nuevas formas de robar información digital a sus víctimas. Estas tácticas cada vez más sofisticadas amenazan la seguridad de nuestras cuentas, datos personales y reputaciones.
1Cambiar contraseñas con regularidad
Una de las mejores maneras de protegerse del robo de identidad es cambiar las contraseñas de sus cuentas a menudo. Esto previene a los atacantes de acceder a sus cuentas a través de la misma contraseña, una táctica común entre los ciberdelincuentes.
Esta práctica generalmente es recomendable, especialmente para cuentas de correo electrónico y sitios web. Los usuarios también deberían evitar usar la misma contraseña para varias cuentas o configurar una contraseña demasiado simple.