La izquierda parece reestructurarse de cara a unas nuevas elecciones. La crisis del coronavirus tendrá un impacto electoral más que notable en la intención de voto de los españoles, pero lo que está claro es que el electorado de Podemos no está contento con su elección, al menos parte de él. Desde que empezó la pandemia, la formación liderada por el vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, no ha hecho más que desinflarse en las encuestas. Y ya ni siquiera las polémicas encuestas del CIS de José Félix Tezanos parecen dar oxígeno a la formación morada.
Si se hace un repaso de los sondeos más relevantes realizados en los últimos meses, todos indican tendencias similares. Algunos varían, especialmente de cara a qué ocurrirá con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; Pero todos apuntan a que Podemos no ha salido bien parado de la crisis.
El último CIS de Tezanos es discreto con el hundimiento de Podemos, pero augura que Iglesias pasaría de contar con el 12,8% de los votos al 11,4%. Pero si volvemos al principio de la pandemia, a marzo, los resultados no son tan diferentes para Podemos.
Sigma-Dos realizó varias encuestas en marzo. Una publicada por Antena 3 indicaba que la intención de voto aumentaría cuatro puntos tanto en el PSOE (que pasaría del 28% de los votos al 32%) como en el PP (que pasaría del 20% al 24%). Pero Vox y Podemos perderían representación. La formación morada liderada por Pablo Iglesias pasaría del 12,8% al 11% y la de Santiago Abascal del 15% al 13,8%. Malos datos para los partidos más jóvenes pero que siguen dejando un Congreso dividido. Aunque no hay que olvidar que esta encuesta se realizó en marzo de 2020.
Sigma-Dos también trabajó para El Mundo y publicó una encuesta unas semanas después que parecían indicar la misma tendencia que la anterior: el refuerzo del bipartidismo. Según estos datos publicados el pasado 19 de abril, el PSOE ya empezaba a sentir la erosión de la crisis en su gestión. Los errores cometidos pasaban una factura fácil de pagar, pero que no dejaba de ser una mera intención. Según los resultados, los socialistas conseguiría el apoyo del 31,7% de los votantes, unas décimas menos que en marzo. El PP, sin embargo, sí que daba un salto de pértiga y se ponía ya en el 25,4%. Unidas Podemos caería al 11,5% y Vox al 11,9%.
La empresa GAD3 también realizó a principios de mayo una encuesta para el diario ABC que auguraba lo mismo. Iglesias pasaba de tener el 12,8% de los votos al 10,9%, lo que le llevaría a perder nada menos que siete diputados.
ARRIMADAS MEJORA
El caso de Ciudadanos es algo distinto. La formación naranja estaba en caída libre desde que empezó la pandemia, pero al parecer, el giro que dio Inés Arrimadas al partido le ha sentado bien. Aunque no mucho. La lideresa del partido ha pasado a apoyar sin reservas a Sánchez y eso le ha valido un pequeño guiño en el CIS de Tezanos, que marca que Ciudadanos pasaría de tener los diez diputados que tiene que le dan el 6,8% de los votos al 9,4%.
También los sondeos más recientes auguran una pequeña mejoría en el partido, pero leve, y todo a raíz de que se ha dignado a apuntalar a Sánchez en el poder tras prorrogar el estado de alarma por un mes más. Ahora, de hecho, Arrimadas suena como aliada para aprobar los presupuestos que necesita el Gobierno para agotar la legislatura.