El presidente de la COP28, Sultan Al Jaber y el presidente brasileño, Lula da Silva, se han comprometido conjuntamente a luchar por un futuro climático «más equitativo» a través de la inclusión de la naturaleza en el centro de la agenda climática de la COP28, en la que Brasil asumirá la Presidencia del G20.
Los mandatarios se han reunido en una reunión climática clave en el marco de la celebración de la cumbre de la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (ACTO) en Belém (Brasil), en la que ambos han manifestado su intención de «construir un puente» que permita un progreso climático «inclusivo, resiliente y duradero».
Durante las conversaciones, ambos han reafirmado la importancia «vital» de proteger la selva amazónica para mantener 1,5ºC al alcance, además de que han subrayado su lucha por la deforestación y la degradación por medio de la bioeconomía y el refuerzo de medidas de adaptación.
De este modo, han identificado como áreas de interés común la reforma de la financiación internacional de la lucha contra el cambio climático y el refuerzo del despliegue de energías limpias ante la próxima COP30 que será acogida en Brasil.
Así, Al Jaber ha reconocido los esfuerzos del presidente brasileño en materia climática: «el Presidente Lula da Silva está aportando la energía, la concentración y el empuje que necesitamos para hacer frente a la urgencia del momento».
Además, ha elogiado el liderazgo «fuerte y sólido» de da Silva, quien ha reducido la deforestación de la Amazonia brasileña en un 34% durante la primera mitad de 2023. «Una gestión que puede ofrecer resultados sustanciales en el mundo real», ha señalado.
Esta cooperación se ha producido tras la propuesta de Al Jaber en la COP28 para acelerar una transición energética ordenada y equitativa, establecer una financiación climática centrada en concentrar esfuerzos en la inclusión de personas, vidas y medios de subsistencia.
Asimismo, Al Jaber ha instado a otros líderes mundiales a unirse a este compromiso, «para que aporten la misma energía y ambición a la COP28 y, en particular, para que se unan en torno a una acción decisiva y logren resultados que cambien las reglas del juego en materia de financiación de la lucha contra el cambio climático y la transición energética mundial».
Al Jaber que además de reunirse con Da Silva también ha intervenido en la cumbre de ACTO donde ha mostrado su reconocimiento a este grupo de países con la protección del Amazonas y su compromiso para apoyar la cooperación Sur-Sur y las alianzas entre Brasil y otras regiones con bosques tropicales que incluyen a Indonesia o República Democrática del Congo.
En todo caso, Al-Jaber ha centrado su mensaje en la necesidad de unir esfuerzos durante la COP28 para elevar la ambición para progresar en los pilares climáticos y construir puentes para lograr un futuro sostenible, en particular en el ámbito de la financiación internacional.
«Esta Presidencia mantendrá la presión sobre los países donantes para completar el compromiso de financiación de los 100.000 millones de dólares y garantizar que una parte proporcional de estos fondos se destinan directamente a la restauración de la naturaleza», ha prometido el presidente de la COP28.
Asimismo, ha manifestado su compromiso con la inclusión de los pueblos indígenas en el desarrollo de soluciones al cambio climático y poner sus derechos en el centro de la COP28. Al-Jaber ha señalado que aunque representan el 5 por ciento de la población mundial, las comunidades indígenas protegen en torno al 80 por ciento de la biodiversidad global.
Por ello, ha defendido que el papel de las comunidades indígenas que no pueden quedar al margen en la conservación de los ecosistemas naturales y en promover el desarrollo de las prácticas de uso de suelo sostenibles. «La COP28 dará espacio a su perspectiva para que sus voces y sus deseos puedan ser escuchados y amplificados», ha garantizado.