Alimentación saludable: 9 formas de adaptar una dieta en verano

En verano, nuestro cuerpo nos pide comidas ligeras, rendidoras, y llenas de elementos nutritivos para mantenernos en buena forma. Pero tal vez nos cueste saber qué ingredientes hay que escoger para asegurarnos una alimentación balanceada.

Para lograrlo, en lugar de recurrir a productos industrializados o ya preparados, podemos acudir a alimentos saludables simples y frescos para darnos una energía extra.

Escoge alimentos de temporada

Escoge alimentos de temporada

En verano existen un sin fin de opciones de alimentos frescos y saludables. Si pensamos en lo que está de temporada, encontraremos tablas de fruta y verdura repletas de ingredientes ideales para aportar a nuestra dieta nutrientes necesarios. Por ejemplo, puedes optar por el melocotón, la sandía, el melón, tomates, o judías verdes y berenjenas para acompañar tus comidas. Muchos de estos alimentos son abundantes y de bajo coste, por lo que además de saludables resultan una buena opción económica.

No solo podemos encontrar frutas y verduras para consumir en verano, sino que también están al alcance legumbres, cereales y hasta pescados. Según los expertos, incorporar pescado en la dieta en verano puede ser una buena opción para mantener un buen estado de salud. La sardina, el atún, el salmón o el boquerón están llenos de los ácidos grasos Omega 3 necesarios para mantener el estado cardiovascular adecuado.

Prepara combinaciones con proteínas saludables

Las proteínas son un elemento clave en nuestra dieta, y en verano hay bastantes opciones saludables para prepararlas. Desde supuestos de queso fresco y algunas lonchas de jamón curado hasta huevos revueltos y setas shiitake. Otra opción interesante son las lentejas, ricas en fibra, vitamina B y minerales. Podemos cocinarlas en la sartén, aprovechando el calor para servir un guiso delicioso y saludable. También podemos mezclarla con un poco de verdura como tomates, patatas o zanahorias para añadir más sabor.

Utilízalos para preparar ensaladas

Utilízalos para preparar ensaladas

Las ensaladas no tienen que ser monótonas y aburridas. Siguiendo un buen equilibrio de alimentos en nuestros platos, podemos hacernos ensaladas con cientos de combinaciones distintas. Si los equilibramos bien, podemos sustituir las proteínas animales por otras más saludables, como nueces, semillas o frutos secos. Estos ingredientes aportan grasas buenas, minerales y vitaminas.

Para aportar sabores diferentes a nuestros platos salados, podemos alternar los aceites que usamos para prepararlos. Es significativo no pasarse con la sal ni con los aceites. El aporte de sal es muy bajo, usar solo una pizca para condimentar ensaladas y pastas. Por otra parte, debemos moderar el uso de aceites especiados y no abusar de los procesados. Estos sí contienen mucho aceite.

Haz postres caseros

Los postres son fundamentales para mantenernos saludables y sin dejar de disfrutar de los placeres pequeños de la vida. En verano, podemos preparar postres caseros con frutas, yogures naturales o algún poquito de sirope siempre light para decorar nuestro plato. Esto es muy interesante, porque muchas veces, el postre se convierte en el plato más importante del día sin que nos demos cuenta.

Las frutas en almíbar se pueden preparar el mismo día para convertir un postre común en algo especial. Si decidimos usar frutas congeladas, una buena opción es comer algún tipo de yogurt natural y sin azúcar para acompañarlo.

También podemos preparar tartas sencillas con ingredientes saludables. Puedes jugar con combinar distintos sabores e ingredientes para lograr tus tartas saladas y dulces perfectas. Y por último, una excelente opción son los smoothies o los batidos preparados con frutas, leche desnatada o almendras, y hielo.

Incrusta las frutas como tentempié

Incrusta las frutas como tentempié

Los tentempiés con frutas son fundamentales para mantenernos saludables. La electricidad entre horas nos da traba, y cuando comemos algo saludable, vamos directo al corazón. No hay mucho que explicar acá, solo que los tentempiés son un excelente aporte para la alimentación. Puedes optar por mandarina, plátano, fresas, uvas, melón, piña, melocotón, mangos o peras en conserva con poco azúcar.

Además de las frutas, también podemos aprovechar para mezclar ciertos productos lácteos con algunas semillas como aderezos naturales, como por ejemplo, usar los yogures naturales sin azúcares añadidos con algunas nueces picadas. También te recomendamos mezclar los productos lácteos con frutas, como por ejemplo, con moras, fresas o frambuesas.

Dulces saludables sin gluten ni lácteos

No hay que desestimar la idea de comer algo dulce, siempre y cuando esté hecho con ingredientes saludables. Existen recetas ricas y no demasiado elaboradas a base de frutos secos, vegetales, semillas y frutas que se pueden convertir en los postres perfectos para nuestros almuerzos o cenas.

Un ejemplo interesante es la tarta de zanahorias. Usa una mezcla de harina de almendras molidas con la de coco, con zanahorias y huevo de pavo para reemplazar a los huevos de gallina. Esta mezcla se compone de algunos de los ingredientes más famosos por ser saludables sin afectar al sabor y la textura de nuestros postres.

Bebe mucha agua

Bebe mucha agua

No olvides el tiempo siempre indispensable que es el de hidratación. En verano es muy fácil deshidratarse, y como resultado se debilitan las defensas del organismo. Así que mantente hidratado y mantén tu cuerpo limpio de impurezas. El agua también ayuda a absorber los elementos nutritivos de los alimentos mejor, y siempre es una buena alternativa para usar como postre.

Para vencer la monotonía, una buena idea es agregar algunas frutas naturales al agua. Por ejemplo, añadir rodajas de limón o pomelo para darle un sabor diferente y un extra de vitaminas C a la mezcla.

Cocina a la brasa

En verano siempre es apropiado hacer algún día de barbacoa al aire libre o preparar algunas recetas a la brasa. Todo lo que necesitamos es hacer una buena planeación de los ingredientes, para elegir sabiamente los alimentos y asegurarnos de calentar adecuadamente la comida, sin pasarnos. Esto hará que nuestras carnes o pescados sean saludables, y seguirán manteniendo el sabor agradable.

Además, si compres carne de origen verificado, podemos estar un paso más cerca de disfrutar, con el máximo sabor, una carne tierna y deliciosa.

Conclusión para una alimentación saludable

Para disfrutar de una dieta saludable en verano, es importante mantenernos atentos a los alimentos que comemos.

Para disfrutar de una dieta saludable en verano, es importante mantenernos atentos a los alimentos que comemos. Debemos consumir alimentos frescos preparados a la plancha o al vapor, e incorporar legumbres, frutas y vegetales en nuestros platos principales.

En definitiva, asegúrate de que tu dieta esté balanceada, eligiendo alimentos de temporada, preparando ensaladas saludables y optando por tentempiés vegetales en lugar de los ultraprocesados. Y sobre todo, recuerda beber mucha agua para mantenerse saludable.