La consultora Proa ha organizado un observatorio para analizar los desafíos a los que se enfrenta la industria de defensa en un contexto marcado por la guerra de Ucrania y la posición actual de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
El observatorio ha contado con la participación del almirante retirado Juan Rodríguez Garat; el presidente de la Asociación Atlántica Española, Adolfo Menéndez, y el director general de la Asociación Española de Empresas Tecnológicas de Defensa, Seguridad Aeronáutica y Espacio (TEDEA), César Ramos, ha detallado la consultora en una nota de prensa.
Ramos ha matizado que la comunicación de la industria con la ciudadanía presenta dos objetivos: reivindicarla como sector clave para la economía española y transmitir en positivo que «para vivir en paz hay que invertir en defensa».
Dentro de la propia industria, Ramos ha señalado que el principal desafío «no es el financiero, ni el presupuestario, ni el tecnológico, ni el empresarial», sino «mantener el estado de opinión favorable» que se ha producido como efecto del conflicto de Ucrania y que ha sacado a los ciudadanos occidentales de su letargo, así como a los responsables políticos».
En ese sentido, ha constatado que «todos los países han reaccionado concediendo una mayor prioridad a una política como es la de defensa, porque han empezado a entender que sin seguridad no hay libertad y sin libertad no hay progreso», y ha añadido que «la defensa es un bien público europeo».
Al mismo tiempo, Ramos ha puesto el foco en la dicotomía de que «nos hacemos cargo del precio de un carro de combate, de una fragata o de un avión militar, pero nos cuesta entender el precio de nuestra seguridad y de nuestro modelo de vida».
Sobre como la guerra de Ucrania ha cambiado el panorama mundial, Garat ha señalado que lo más importante son las estructuras que el conflicto ha derribado, como la ONU, que según el almirante retirado «nunca ha sido más inútil que en esta guerra».
El militar retirado ha concluido, en línea con Ramos, que «si quieres la paz, prepárate para la guerra», pues hasta ahora se había pensado que los arsenales nucleares y la dependencia comercial entre Rusia y Alemania harían imposible el estallido de un conflicto en Europa como el que acontece en Ucrania.
«El mundo vuelve a rearmarse, nos devuelve a una paz armada y nos sirve para que los españoles entendamos para qué sirven las Fuerzas Armadas», ha apostillado Garat.
Por su parte, Adolfo Menéndez ha desligado la guerra del aumento en el gasto de defensa y lo ha explicado porque «empezamos a comprender que queremos vivir en paz, en libertad y en un estado de Derecho», si bien el conflicto de Ucrania ha sido «una advertencia de que no podemos vivir en la inopia como vivíamos».
En el turno de preguntas, el ex-JEMAD y ex-director del CNI, Félix Sanz Roldán, reflexionó desde el público que «España es uno de los mejores aliados de la OTAN, pero nadie se lo cree. ¿Por qué? ¿Qué debemos hacer? Y todo porque nos catalogan por lo que invertimos en defensa y no por lo que aportamos».
El almirante Garat coincidió con Roldán, pero advirtió que «todo el mundo sabe que la disuasión la hacen los portaaviones norteamericanos, no las fragatas españolas, que no llevan la munición adecuada porque no ha habido presupuesto para ello».