Sumar sigue sin marcar agenda. Yolanda Díaz ha perdido el aura de presidenta tras decidir no contar «con el motor Podemos», en palabras de Iván Redondo, al colocar un veto sobre la ministra Irene Montero.
Los yolandistas no levantan cabeza mientras el PSOE resucita demoscópicamente de la mano de José Luis Rodríguez Zapatero, muy aplaudido en redes por su intervención en ‘Herrera en COPE’ y sus guiños a Montero tras recibir un reconocimiento del Ministerio de Igualdad.
TOUR MEDIÁTICO XXL
Pedro Sánchez ha emprendido un tour mediático que ha contado con una parada en ‘El hormiguero’ que le ha servido al presidente del Gobierno para merendarse a Pablo Motos, ante el que intentó derribar los bulos que circulan sobre su mandato.
Sobre la elección de una fecha en medio del verano, asegura que vio «claro» que España «necesitaba elecciones cuanto antes. ¿Cuántas veces habéis criticado a los políticos por no asumir sus resultados electorales? Yo lo hice el 28 de mayo».
El candidato socialista ha explicado a su manera sus continuos cambios de parecer: «Rectificar está en el ADN de un político, porque tenemos que adaptarnos a la realidad. He tomado decisiones diferentes a las que dije antes de las elecciones pero creo que el resultado es que hoy hay una mayor tranquilidad en la sociedad catalana».
Y también intenta que no se equipare a Sumar y Vox: «Se lo digo con todo el respeto y con todo el cariño. Yo no compararía a Yolanda Díaz con Santiago Abascal. De Yolanda sé de su compromiso democrático, se de su buena labor y su buen hacer en el Ministerio de Trabajo».
EL SUELDO DE FEIJÓO
El PSOE se ha puesto al contraataque contra el PP, incómodo por la negociación extremeña, los disparates de varios presidentes de cámaras autonómicas elegidos por Vox, el ridículo de la campaña de Verano Azul o el sueldo de Alberto Núñez Feijóo, que se negaba a desvelar cuánto cobraba de sobresueldo por liderar a los ‘populares’ (fueron casi 40.000 entre abril y diciembre de 2022).
Sánchez intentaba meter el dedo en la llaga: «No me puedo poner en la cabeza de Feijóo. Eso merece ser explicado a la ciudadanía. Venimos de un tiempo en el que se congelaron las pensiones y el SMI durante la legislatura de Rajoy mientras los líderes del país cobraban sueldos y sobresueldos en a y en b. Desde el punto de vista de la ejemplaridad si no hay nada que esconder, ¿por qué se ocultan los datos?».
El presidente del Gobierno también ha arremetido contra Vox: «Creo que no se puede justificar lo injustificable. Esta gente se está encaramando a las instituciones porque el PP los está votando. No se puede decir que es un divorcio duro o que es un universitario. ¿Pero qué tiene que ver? Hemos retrocedido en 20 días 20 años en el debate público».
Sánchez cree que «escuchar que en ayuntamientos se declaran libres zonas del colectivo LGTBI, que se prohíbe la concentración cada vez que hay una asesinada por violencia machista no por la violencia machista sino por todas las violencias… Es reconocer sin ambages que la violencia machista en España no existe. Por esto creo que lo preocupante no es que Vox se encarame en las instituciones con representantes, sino que el PP se haya ultraderechizado y que haya sumido esos discursos que le marca la ultraderecha».