El 28 de junio es el día oficial de la lucha de las personas LGTBIQ+ y los partidos políticos no solo han incorporado las consignas de este colectivo a sus discursos, sino que su lucha se ha convertido en uno de los pilares del debate de esta campaña electoral para el 23J. El apoyo o no a estas siglas está resultando ser una «moneda de cambio» para conseguir votos y todos los partidos que están públicamente a favor del colectivo LGTBIQ+ tienen un representante que es parte de esta comunidad y que acapara los apoyos de estos dentro del grupo político. Sin embargo, en el PSOE de Pedro Sánchez no hay ningún integrante socialista involucrado, aceptado y querido dentro del colectivo LGTBIQ+, siendo Rodriguez-Zapatero quien suplió esta figura en el acto institucional del Orgullo 2023.
El mismo día que el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, aparecía en ‘prime time’ en el programa televisivo El Hormiguero con la bandera del arcoíris adornando su muñeca, se celebraba el acto institucional de Orgullo organizado por el Ministerio de Igualdad. El Real Jardín Botánico fue el lugar elegido por Irene Montero, Ione Belarra y Ángela Rodríguez Pam para realizar un evento al que no acudió ni un solo miembro del Gobierno socialista actual. El lazo más cercano al PSOE fue la presencia del ex presidente José Luis Rodríguez-Zapatero, quien fue reconocido por las representantes de Igualdad con un Premio Arcoíris y estuvo, en todo momento, Acompañando cálidamente y alabando el trabajo del ministerio de Montero.
Más allá de la presencia del Presidente socialista que aprobó el matrimonio igualitario, no hubo rastro de ningún representante gubernamental del PSOE. En este sentido, lo más cercano que existe a un representante de este colectivo entre los socialistas es Víctor Gutiérrez, un joven periodista que cubre el puesto de secretario LGTBI a nivel interno en el partido y que tampoco asistió al evento institucional organizado por el Ministerio de Igualdad. Por su parte, Zapatero hizo de cara visible de la diversidad del PSOE y no solo reconoció el trabajo de Irene Montero y todo su equipo, sino que afirmó que a él le «gusta este Ministerio de Igualdad». Además, el ex presidente añadió: «a mi no se me olvidan las cosas, y a mi no se me va a olvidar Irene».
Un puesto que dejó libre Carla Antonelli por no «sentirse representada»
El PSOE no ha estado siempre en esta situación. El Gobierno de Pedro Sánchez había encontrado una figura fuerte perteneciente al colectivo LGTBIQ+ y que hacía de voz socialista en los temas relacionados con esta comunidad. Esta persona era Carla Antonelli, quien fue la primera diputada trans de la democracia española y que formó parte del partido socialista durante 45 años. Su trabajo en el PSOE estuvo completamente ligado a cumplir los objetivos políticos del colectivo LGTBIQ+ y ha sido una figura imprescindible para la elaboración y aprobación de leyes como la del matrimonio igualitario o o la de Identidad de Género para las personas transexuales.
Sin embargo, la corriente que tomó el partido socialista de Pedro Sánchez en la elaboración de la «Ley Trans», hizo que Carla Antonelli se diera de baja del PSOE en el 2022. Su marcha fue una consecuencia directa de la posición de Carmen Calvo, quien fue la presidenta de la Comisión de Igualdad del Congreso de los Diputados y que negó en reiteradas ocasiones los planteamientos de esta Ley. Finalmente, la Ley trans se aprobó, pero se llevó por delante no solo a Calvo, sino también a la posibilidad de que Antonelli fuera la representante del colectivo LGTBIQ+ que ahora mismo no tiene el PSOE. En la actualidad sigue siendo diputada de la Asamblea de Madrid, pero en el partido de Más Madrid, formación donde ha encontrado un lugar como diputada y con un reconocimiento por su activismo.
El PSOE más progresista, en manos de Zapatero
la figura de Victor Gutiérrez no ha llegado a cuajar, más allá de actos que nada tienen que ver con lo gubernamental. Carmen Calvo se marchó, Antonelli también y el PSOE no tiene un representante con la suficiente fuerza como para igualar y acaparar un nicho, al fin y al cabo político, que está liderado por la ministra de Igualdad en funciones y todo su equipo del ministerio.
Por mucho que Sánchez haya afirmado que las políticas de Irene Montero son desde » la confrontación», la realidad es que ella y sus compañeros de partido han encontrado su lugar en un ‘target’ que, a día de hoy, resulta fundamental tener en cuenta de cara a las elecciones generales del 23J. Mientras que Pedro Sánchez no encuentra a la figura que pueda recuperar la imagen que dejaron políticos como Pedro Zerolo o Carla Antonelli, el PSOE se ve arrastrado a que el ex presidente Zapatero sea la cara de un colectivo al que no pertenece, pero donde tienen reconocida su labor e implicación.