Las naranjas de los árboles en el sur de España decoran la mayoría de las calles andaluzas y sobretodo en Sevilla, sin embargo el consumo de estas frutas no está permitido para las personas, por lo que si vas caminando por la calle y te apetece un naranja pues no la puedes sacar del árbol.
La razón por la que no se pueden consumir estas naranjas es por la contaminación que estas tienen al estar expuesta a la polución de los gases y productos tóxicos de la ciudad, siendo esto muy dañino para la salud. La utilización de estas frutas por parte del Ayuntamiento son utilizadas por: vertederos autorizados y de gestión controlada para la fabricación de compost y cosméticos y explotaciones ganaderas para la alimentación de ganado caprino.
Finalmente, cabe mencionar que Sevilla cuenta con 40.000 naranjos que están repartidos en todos sus municipios, aunque también es común poder encontrar estos árboles en ciudades como Valencia y Málaga.
