sábado, 23 noviembre 2024

¿Quién fue realmente el Marqués de Sade?

Seguro que término sadismo te viene a la mente cuanto lees el nombre del Marqués de Sade. No cabe duda, pues el origen del mismo está en este escritor llamado de forma completa Donatien Alphonse Françoise de Sade. Después de muchos siglos, aún le persigue la leyenda negra que le rodea con respecto al terreno sexual. Este novelista vivió los crueles años de la Revolución Francesa y se vio envuelto en diversos escándalos sexuales que relegaron su obra al ámbito de lo maldito.

Su infancia y juventud la vivió de forma convencional, como cualquier otra persona. Años más tarde, comenzaban sus andanzas sexuales y oscuras que coparon páginas y páginas dentro de su literatura. Nació en París en el 1740 y viajó por varios países de Europa con sus padres debido a asuntos diplomáticos. Fue un niño del que se dice que tuvo una mente muy brillante, enamorado de las obras históricas. Sin embargo, su nombre ha sobrevivido por un tema bien distinto.

¿Quién fue realmente el Marqués de Sade? Descubre la historia detrás de la leyenda.

El Marqués de Sade, destacado militar francés

etapa militar

Con 16 años, participó en su primera batalla, después de haber ingresado en la academia militar. Estuvo al mando de cuatro compañías de filibusteros en la toma de Mahón durante la Guerra de los Siete Años. Después de esta actuación, cobró un renombre importante. Por eso, en 1763, recorrió muchos de los frentes franceses abiertos a lo largo de Europa. Alcanzó el grado de capitán en la caballería de Borgoña.

Tras su regreso a Francia, se casó en contra de su voluntad con la primogénita de la familia Montreuil. En ese momento, comenzó su carrera literaria, además de empezar a causar estragos con sus escándalos sexuales. Vivía en el castillo heredado por su mujer en la zona de Normandía, pero fue arrestado y enviado a la fortaleza de Vincennes por orden del rey.

Distintos autores afirman que esta detención estaba relacionada con la publicación de una obra firmada por el Marqués de Sade que tenía bastante contenido sexual. En la prisión pasó 15 días, pero la familia de su mujer decidió hacerse cargo de él.

Título nobiliario y los primeros escándalos de índole sexual

marques sade prision

Donatien tuvo varias amantes, sobre todo mujeres habituales de la Corte del rey. También disfrutó de los servicios de prostitutas en su ciudad natal, París. Su carrera en la política no hacía más que avanzar y, con la muerte de su padre en 1767, heredó el título de marqués.

Tan solo dos años después, tuvo lugar el primero de los más fuertes escándalos sexuales que le rodean: el de Arcueil. Este destruyó el prestigio cosechado por el noble. Según la víctima, el Marqués de Sade contrató a una mujer llamada Rose Keller. La forzó, la azotó y la torturó de forma imparable echando cera ardiendo sobre cortes que le había realizado con un cuchillo.

No se sabe a ciencia cierta si esta historia es verídica o tiene más que ver con los textos de alto contenido sexual que ya estaban circulando por la época. No obstante, lo que sí es cierto es que Donatien pasó siete meses en prisión y el incidente tuvo consecuencias fatales para su carrera.

Dedicado al teatro por completo

orgia sade

Después de esto, cuando fue liberado, decidió volcar su alma en otra de sus pasiones, el teatro. Montó uno propio dentro del castillo de Lacoste, formando una compañía que relataba más de veinte obras. Cuando parecía estar reponiéndose, otro escándalo sexual asolaba su carrera.

Fue el caso de Marsella. Se dice que el Marqués de Sade, después de haber disfrutado de una orgía con diversas prostitutas, las envenenó con un afrodisíaco denominado como «mosca española». Dos de ellas sufrieron una indisposición que no cesó hasta pasados dos días.

El noble fue sentenciado a muerte por sodomía y envenenamiento. La pronta recuperación de las mujeres no consiguió rebajar la condena. Sin embargo, antes de que lo cogieran, huyó hasta Italia, donde lo arrestaron en Saboya con la ayuda de su suegra.

El largo período en la cárcel que sufrió el Marqués de Sade

toma de la bastilla

Estuvo encerrado en el castillo de Miolans pero pudo evadirse con la ayuda, de nuevo, de su esposa. Así se refugió en Italia y quizá en España, aunque tuvo que volver a París en el 1777 después de enterarse de la próxima muerte de su madre. La misma noche que regresó, fue capturado y encarcelado en Vincennes.

Aquí permaneció encerrado durante trece largos años. No obstante, su causa se anuló solo un año después de haber ingresado en prisión. Estar allí tanto tiempo hizo estragos en su salud, tanto física como mental. El único contacto del Marqués de Sade era su esposa, por lo que dedicó su vida a escribir teatro, cartas y leer novelas.

En el año 1784, se le trasladó a la prisión de la Bastilla, debido a que la otra era demasiado «lujosa». El nuevo destino no le gustó, y no hizo más que hablarle mal de él a su esposa en las cartas que le escribía. Con el estallido de la Revolución Francesa, cinco años más tarde, fue trasladado a un manicomio, antes de que la Asamblea Revolucionaria anulase las medidas impuestas por su suegra para no liberarlo.

El libro «más abominable» del escritor

justine marques de sade

Cuando salió de prisión en 1790, apenas podía andar, estaba obeso, hundido y completamente arruinado. A pesar de las dificultades, el escritor participó de forma activa en el proceso revolucionario. De hecho, escribió discursos importantes, como el leído durante el funeral de Marat y fue secretario de una parte de la ciudad. De forma paradójica, su familia política, los Montreuil, tuvieron que pedirle ayuda cuando fueron calificados como «extranjeros». El Marqués de Sade ayudó a sus suegros a pesar de haberlo mantenido trece años en prisión.

No obstante, en el período de Robespierre, volvió a ser encarcelado debido a su condición de moderado. De nuevo, consiguió librarse de la guillotina. Cuando salió, vivía en la indigencia. Además, sus textos despertaban odios en todos los niveles de la sociedad debido a sus continuas menciones a las violaciones, parafilias y otras perversiones relacionadas con la extrema violencia. Se dice que Napoleón echó al fuego la novela Justine o los infortunios de la virtud, calificándolo del libro «más abominable» que había leído en su vida. Buena parte de su obra se perdió debido a la censura.

Durante el régimen de Napoleón también fue encarcelado, ya en el año 1801, acusado de demencia libertina. Gracias a la familia, se le ingresó en el asilo para locos de Charenton. Murió en el año 1814 y, tras su muerte, uno de sus hijos quemó todos sus manuscritos inéditos. Aunque la siguiente generación de escritores se interesó en su obra, el nombre del Marqués de Sade sigue ligado a la leyenda negra que le persiguió en vida.