El ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, ha echado mano del ‘caso Gürtel’ para defenderse de las críticas del PP por haber fichado al arquitecto Ignacio Carnicero, amigo de la infancia del presidente Pedro Sánchez, como nuevo director de Agenda Urbana y Movilidad.
Durante la sesión de control al Gobierno en el Congreso, el diputado del PP y exalcalde de Boadilla Antonio González Terol, ha pedido cuentas al ministro por el nombramiento de Carnicero para una dirección general «sin contenido» y que se ha llevado a cabo, además, en pleno estado de alarma por el coronavirus.
A su juicio, el «mérito» que tiene el nuevo director de Agenda Urbana y Arquitectura es ser «el único español al que Sánchez no ha mentido». «Dijo que lo ficharía y se ha sumado al mastodóntico ejército de 260 altos cargos», una cifra, ha dicho el ‘popular’ que representa un 45% más que los que había en el Gobierno de Mariano Rajoy, y que supone un coste de 78 millones de euros.
66 ALTOS CARGOS DEL PSOE DESDE 2018
Pero lo más preocupante, en su opinión, es que el amigo de Sánchez no es el único al que el PSOE le ha dado un alto cargo pues, según sus cuentas, ya son 66 los miembros del partido que ocupan uno desde 2018, citando entre otros al sociólogo José Félix Tezanos al frente del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) o al que fuera director de Gabinete de Sánchez, Juan Manuel Serrano, en la Presidencia de Correos.
González Terol ha acusado al Gobierno de haberse convertido en el «campeón» del «dedazo» y de las «puertas giratorias» como lo demuestra, según ha recordado, que tanto el PSOE como Podemos hayan situado a dos exministros y un asesor en el Consejo de Administración de Enagás, a una asesora de Moncloa en la Comisión nacional de los Mercados la Competencia (CNMC) o al chófer y guardaespaldas de Ábalos en el Consejo de Administración de Renfe Cercanías.
«¿Dónde queda la tan cancareada meritocracia de Sánchez? –ha planteado el ‘popular’ madrileño– Yo se lo digo: en el mismo sitio que su promesa de no pactar con Bildu, Esquerra Republicana o Podemos».
En su respuesta, Ábalos ha comenzado dejando claro que los criterios que guían la política de nombramientos de su Ministerio son los que marca la ley y ha justificado el fichaje de Carnicero en la necesidad de cubrir la Estrategia Española de Agenda Urbana que aprobó el anterior Gobierno para atender el mandato de Europa sobre los objetivos de desarrollo sostenible.
El ministro ha recalcado, además, que de las 11 direcciones generales 10 la ocupan funcionarios y sólo hay una «excepcionada«, algo que, según ha apuntado, «no debería extrañar» al PP. Sobre todo porque durante el Ejecutivo de Rajoy, ha recordado, de las tres direcciones generales de Viviendas, dos estuvieron excepcionadas y la tercera la ocupó un funcionario «que tuvo que dimitir por estar imputado en la venta ilegal cuando era miembro de la Comunidad de Madrid de casi 3.000 viviendas sociales».
BOADILLA, EPICENTRO DE LA GÜRTEL
Dicho esto, el titular de Transportes ha cargado contra González Terol, alcalde de Boadilla entre 2011 y 2019, a quien cree que se le ha encargado dirigirle esta pregunta en el pleno «porque sabe mucho de urbanismo» en tanto que «viene del epicentro del caso Gürtel’. «Usted sí que sabe de urbanismo», ha ironizado el ministro destacando que en su día se declarara nulo su plan urbanístico en esa localidad madrileña.
«Pero para que se vaya tranquilo y para que tenga sentido su representación política, el sábado se publicó la licitación del contrato para la viabilidad de las Cercanías en su municipio. Llévese algo para casa, hombre», le ha soltado.