El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) ha publicado este viernes la ‘Guía de recomendaciones para el diseño de infraestructura ciclista’, un manual de referencia para facilitar a las administraciones competentes la planificación, construcción y mantenimiento de las vías ciclistas con el principal objetivo de promover un uso seguro y cómodo de la bicicleta.
La guía, ya disponible en la página web del Ministerio, es una herramienta de consulta para el personal técnico de las distintas administraciones y de las empresas de ingeniería encargadas del desarrollo y conservación de las infraestructuras ciclistas.
Entre otras cuestiones, la guía incluye recomendaciones sobre el ancho que debe tener la vía ciclista para permitir una circulación cómoda, su correcta integración en el entorno, la separación respecto al tráfico motorizado para garantizar la seguridad del usuario o indicaciones sobre su correcta iluminación y señalización.
Este documento plantea diversas propuestas basadas en criterios técnicos con el objetivo de alcanzar unos estándares que garanticen la máxima homogeneidad y calidad de las infraestructuras teniendo en cuenta la variabilidad de los terrenos y las ciudades.
Esta herramienta también propone una serie de opciones de diseño para que cada gestor elija la que más se parezca a las características del entorno.
La publicación de esta guía se enmarca en la ‘Estrategia Estatal por la Bicicleta’, aprobada en junio de 2021 y tiene el objetivo de impulsar políticas públicas que promuevan su uso en todos los ámbitos, en concreto, en movilidad obligada, ciclologística, recreativo, turístico y deportivo.
Además, esta herramienta se ha construido con base en los criterios establecidos en la nueva pirámide de la movilidad, en la que primero va el peatón y luego la bicicleta.
La guía consta de ocho capítulos que abarcan todos los aspectos técnicos que deben afrontarse a la hora de implantar una vía o red de vías ciclistas, desde su planificación o integración en los distintos entornos hasta su mantenimiento y gestión.
Finalmente, la guía nace con una clara vocación colaborativa y un carácter de utilidad y perdurabilidad, lo que conlleva su revisión periódica para reflejar todas las mejoras e innovaciones que vayan surgiendo en este campo, así como todos aquellos aspectos no considerados que puedan ser relevantes para sus destinatarios.