El Partido Popular de Madrid no es un territorio amable para Pedro Rollán. Los empresarios reconocen que el vicesecretario general de Coordinación Autonómica y Local del PP presume de que será ministro de Transportes. Pero el mero hecho de que dé el salto al Gobierno pone los pelos de punta en algunos sectores del PP de Madrid. Desde el entorno de Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, presionan para que Rollán no sea reconocido con galones en el Ejecutivo de Alberto Núñez Feijoo siempre y cuando gane las elecciones. Desde el PP de Madrid airean la idea de que Rollán ha tenido mucha exposición con empresas que le pueden pasar factura y que sus injerencias en Torrejón de Ardoz tampoco ayudarían si fuera ministro. Eso sin entrar en que Ayuso no le considera su «cuota».
Cuando Feijoo forme Gobierno, siempre y cuando lo consiga tras el 23-J, tendrá que tirar de cuotas regionales. Habrá buena presencia de los populares andaluces, valencianos y de todas las autonomías donde el partido tenga peso. Peros sobretodo tendrá que haber cuota en Madrid del PP de Ayuso. La idea inicial de Génova es la de nombrar a Pedro Rollán ministro contándolo como cuota del PP de Madrid, pero el entorno de Isabel Díaz Ayuso ya ha dejado claro que Rollán no solo no es de los suyos, sino que tiene cuentas pendientes que le pueden pasar factura si éste asciende en el Partido Popular de la mano de Feijoo. Ya sentó lo suficientemente mal en el PP de Madrid el hecho de que Rollán estuviera dando saltos en el balcón de Génova tras las elecciones autonómicas y municipales.
Fuentes del Partido Popular de Madrid dejan claro que Pedro Rollán no es de los suyos. Aseguran que se ha formado un pequeño equipo de expolíticos relacionados con Cristina Cifuentes con los querría contar para todo. Sin embargo, en Sol son perfectamente conscientes de esta realidad y quieren boicotear el ascenso de Rollán en Génova porque se huelen que Alberto Núñez Feijoo tiene toda la intención de llevarse a Pedro Rollán a Transportes como «cuota» del PP de Madrid. Las relaciones entre el Partido Popular de la capital y Rollán están muertas desde el mismo momento en el que supieron sus pretensiones a hacerse con el puesto de José Luis Martínez-Almeida, alcalde de Madrid, en contra del criterio de Ayuso y con el apoyo explícito de Alberto Núñez Feijoo. Ahora el PP de Madrid airea trapos sucios con tal de condicionar la decisión que se tome respecto al vicesecretario general de Coordinación Autonómica y Local del PP.
De momento solo han dejado caer advertencias veladas. Aseguran fuentes del PP de Madrid que la sobreexposición de Rollán a muchas empresas puede dar ciertos dolores de cabeza a nivel mediático al Partido Popular si éste es nombrado ministro. El hecho de que haya interferido en todas las decisiones que se han tomado en el PP de Torrejón de Ardoz (dado que es presidente del Partido Popular en este municipio) y sobretodo que haya sido un elemento de discordia por tomar la iniciativa en la gestión interna del partido ignorando las decisiones de Sol ha sentado muy mal en el PP de Madrid. Las elecciones municipales estuvieron marcadas por el choque entre las decisiones de Alfonso Serrano y las de Pedro Rollán con la sombre de Feijoo siempre presente.
En el PP de Madrid tienen claro que el vicesecretario general de Coordinación Autonómica y Local del PP , Pedro Rollán, no es de los suyos. Y quieren empantanar lo más posible sus posibilidades políticas. Que Almeida sacara mayoría absoluta en Madrid obligó a Génova a dar un giro radical con Rollán dado que él esperaba recaer en el Ayuntamiento como candidato en un futuro. Ahora el escenario es bien distinto, pero el PP de Madrid quiere escenificar su divorcio.