Irene Montero tiene un serio problema para seguir en la política. Se ha convertido en una ministra que solo resta. Las negociaciones entre Sumar y Podemos se han enquistado por este hecho mientras desde el PSOE hay fuentes que aseguran que «han acabado con ella» al utilizarla desde el Gobierno como parapeto mediático. Desde Moncloa no lo niegan. Y desde Ferraz lo confirman. Irene Montero fue muy útil para Pedro Sánchez y ahora paga las consecuencias porque prácticamente todos los agentes políticos de la izquierda la vetan en Sumar. Desde el PSOE tienen claro que la razón por la que la ministra de Igualdad está tan estigmatizada tiene que ver con ellos. «Margallo tenía razón», comentan. «La dejaron estrellarse».
Ya lo dijo en la Cadena SER el exministro José Manuel García Margallo. Irene Montero salió adelante con una ley (la del solo sí es sí) que básicamente tenía errores de forma que harían que los agresores sexuales pudieran ver reducidas sus penas. Fuentes del PSOE reconocen que sus juristas lo sabían. No solo porque el Consejo General del Poder Judicial hubiera emitido un informe advirtiendo de ello, sino porque revisaron punto por punto la ley y sabían que sería nefasta en algunas cuestiones como la reducción de penas para muchos (ya más de 1.000) condenados. «Margallo tenía razón», aseguran a MONCLOA.com fuentes del PSOE. El Gobierno siempre estuvo «agradecido» por el hecho de que Irene Montero se llevara todos los focos y ahora ella paga las consecuencias de la nefasta gestión.
Desde el PSOE utilizaron a Montero como parapeto. Estas mismas fuentes detallan que era vox populi a nivel interno el hecho de que era necesario darle más protagonismo a la ministra de Igualdad en los medios de comunicación porque así evitaba que los ministros socialistas y la gestión general del PSOE estuviera en entredicho. Que el exministro popular lo dijera en la Cadena SER no despertó a nadie de su letargo dado que las diferentes fuentes socialistas consultadas lo confirman: el PSOE acabó con Irene Montero al dejarla llevar adelante una ley que sabían que sería polémica en algunas cuestiones. La ministra de Igualdad y su carácter hicieron el resto. Y ahora las negociaciones con Sumar están en un punto muerto.
Fuentes del PSOE reconocen que ese informe del CGPJ no fue el único que advirtió de que la ley traería estas consecuencias. Diferentes magistrados de corte progresista avisaron ya al presidente del Gobierno y a Moncloa de que esa ley tenía errores de forma muy básicos. Desde Juan Carlos Campo, exministro de Justicia y magistrado del Tribunal Constitucional, hasta Cándido Conde-Pumpido, presidente del Constitucional, fueron muchos los que confirmaron a la esfera socialista que la ley del solo sí es sí sería un fiasco a la hora de aplicarla. Sin embargo, dejaron que Irene Montero se estrellara porque «le venía bien al partido». Desde luego, la ministra se llevó todos y cada uno de los focos mediáticos y se llevó un conteo obsesivo desde algunos diarios que lastró considerablemente la imagen de una ministra que ahora mismo solo resta.
Ahora mismo el PSOE está pendiente de que Sumar y Podemos lleguen a un acuerdo porque beneficia al bloque progresista. Hablamos de nada menos que de 15 parlamentarios de más o de menos. En cualquier caso, los socialistas dan por amortizada a Irene Montero y no se sienten demasiado preocupados por si va o no en las listas. La sensación de que la ministra de Igualdad no repetirá impera, pero todo queda por ver. Desde luego, todas las formaciones que han conseguido integrarse en Sumar la vetan y no quieren contar con una ministra como ella para la próxima legislatura en las listas.