Aprender un nuevo idioma no solo influye positivamente en el proceso de aprendizaje y de pensamiento de las personas, sino que también permite acceder a mejores puestos de trabajo y oportunidades de formación.
En el caso de las personas que hablan inglés, estas ventajas se magnifican aún más, teniendo en cuenta que este idioma es el utilizado para universalizar la comunicación y se mantiene vigente en un contexto que cada día se acerca más a un esquema de vida globalizado.
Consciente de esta creciente necesidad, la escuela de formación en idiomas English Factory diseñó un modelo de negocio educativo, rentable y fácil de gestionar, con el cual extender el aprendizaje del inglés a diferentes municipios y comunidades. Este modelo se materializó en un programa de franquicias academias de inglés, con el cual personas de diferentes partes de la península pueden liderar y administrar un negocio que tenga como objetivo ayudar a otros en su desarrollo intelectual y profesional.
English Factory y su metodología de aprendizaje
English Factory ofrece un proceso de aprendizaje de inglés de 360°, en el cual se abordan las competencias básicas de enseñanza desde un punto de vista dinámico e integral. Todo esto con el interés de que las personas adquieran las habilidades necesarias para desenvolverse con fluidez en el uso de este idioma, mientras reciben los conocimientos básicos para aprobar los exámenes de clasificación internacionales y obtienen sus certificaciones oficiales. English Factory prepara a sus estudiantes para los exámenes de Cambridge, TOEIC y TOEFL, los cuales son solicitados por universidades y empresas de diferentes partes del mundo.
Ambientes de enseñanza para estimular el aprendizaje
Cada una de sus instalaciones cuenta con un interiorismo industrial y vintage, cuyo diseño estimula la adquisición de conocimiento. Para English Factory, esta decoración es determinante en sus procesos de enseñanza, por lo que todas sus franquicias academias de inglés deben contar con estos elementos e infraestructura para poder funcionar.
Las franquicias que ofrece esta academia especializada ofrecen una alta rentabilidad, ya que garantizan al franquiciado una cantidad mínima de 16 estudiantes por grupo. Además, reciben apoyo en la selección de personal docente y administrativo, con el objetivo de mantener el correcto funcionamiento de la franquicia, ajustándose al modelo educativo de English Factory. Todos los procesos, planificaciones y cronogramas de los profesores se encuentran regulados desde la central, liberando de cargas laborales a los franquiciados, para que solo se preocupen de la gestión de su sede.
Los interesados en un modelo de negocio educativo y rentable solo deben acceder a la página web de English Factory y solicitar más información sobre su programa de franquicias academias de inglés. Esta compañía garantiza el retorno de la inversión en un periodo corto de tiempo, ya que su programa se enmarca en la necesidad de las personas por dominar a la perfección un idioma que, en la actualidad, forma parte de muchos ámbitos de la vida económica y cultural del mundo.