miércoles, 11 diciembre 2024

El ‘clan gallego’ del PP asume la realidad que les viene: «Abascal pedirá un ministerio»

El Partido Popular sabe que necesita a Vox para gobernar. En el mejor de los casos, el ‘clan gallego’ de Alberto Núñez Feijoo es consciente de que no podrá gobernar en solitario. Y el problema es que no tienen cintura política para llegar a pactos con terceras agrupaciones como sí tiene Pedro Sánchez. El problema es que en Génova son conscientes, según fuentes del PP confirmadas también por fuentes de Vox, que Santiago Abascal no buscará un acuerdo programático para apoyar a Alberto Núñez Feijoo Feijoo, sino que directamente exigirá ministerios. Y ya están preparando el terreno para ello.

El Partido Popular espera seguir la misma estrategia del presidente de Andalucía, pero los resultados no serán ni parecidos. El PP quiere arrancar todos los votos posibles del seno de Vox y sabe que después de haber hecho desaparecer a Ciudadanos el objetivo es recuperar parte de su viejo electorado en el partido de Abascal. Sin embargo, los cruces de acusaciones y los ataques políticos se han recrudecido y dificultarán en un futuro las negociaciones de dos formaciones que están condenadas a entenderse si quieren sacar a Pedro Sánchez de La Moncloa tan pronto como se acaben las elecciones generales. Desde Génova lo saben, pero también son conscientes de que Abascal no regalará su apoyo.

Abascal pedirá ministerios. Esto como poco. Si los resultados son mejores de los esperados, solicitará incluso una vicepresidencia. De hecho, desde Génova saben que el presidente de Vox imitará a Pablo Iglesias e incluso elevará el tono. El ‘clan gallego’, sin embargo, está convencido de que la mejor estrategia es imitar al presidente de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, dejando de lado a Vox, pero Feijoo está todavía muy lejos de la mayoría absoluta ubicada en 176 diputados. Condenados a entenderse, sí, pero el PP no parará de dar golpes a sus futuros socios de gobierno para menguar sus posibilidades.

En Génova han asumido, aún así, que está convencidos de que tendrán que ceder. El problema es que Vox tenga mucha más fuerza de la que se esperan. Dar un ministerio entra en sus planes, pero no entregar varios o dar alguno de Estado como el de Interior, una de las obsesiones de Vox. La formación de extrema derecha no regalará su apoyo, pero no solo llevará a cabo esta práctica en el Gobierno tras las elecciones generales, sino que también lo aplicará a las comunidades autónomas e incluso a los municipios. Vox está en plena guerra con el PP pese a que son conscientes de que los populares no tienen cintura para buscar apoyos en otros partidos.

Santiago Abascal ha conseguido lo que quería. De hecho, manejan encuestas internas en las que se refleja que la moción de censura les ha beneficiado. Aún así, lo cierto es que no tienen ya esa proyección política que tanto atemorizaba al Partido Popular. Las encuestas dan 140 diputados a Feijoo en uno de los mejores casos y a Vox lo necesario para que lleguen a la mayoría absoluta. Sea como sea, en el PP saben que por mucho que utilicen el argumento de que «o Sánchez o nosotros», en Vox no se dejarán llevar por la amenaza. El PP va asumiendo paso a paso que tendrán que ceder algún ministerio que otro o que incluso en el peor de los casos tendrán que ceder una vicepresidencia, como hizo el PSOE con Podemos.

El ‘clan gallego’ aún así tiene claro que la estrategia electoral tiene que ser la misma que han seguido en Andalucía y atacar de plano a Santiago Abascal, a Vox y a todo lo que tenga que ver con Iván Espinosa de los Monteros. Hay voces en Génova que aseguran que esto traerá dificultades y problemas serios a la hora de negociar con Vox, pero los gallegos están más que dispuestos a llegar hasta el final porque confían en que su estrategia les lleve a mejorar su posición frente a Vox además de que creen firmemente que los de Santiago Abascal no llegarán hasta el final con sus amenazas de dejar que Sánchez revalide su cargo.