Tener un modelo de negocio implica depositar un gran volumen de tiempo y energías en sacarlo adelante. Algo que, por cuenta propia, tiende a resultar especialmente agotador; de ahí que la externalización de ciertas labores sea toda una tendencia. No obstante, cuando hablamos de temas tan delicados como el marco legal o el financiero, delegar funciones deja de ser un consejo para convertirse en una obligación. De ello depende en gran medida la viabilidad de la empresa; algo que nos obliga como directivos a recurrir a despachos de abogados y auditores que den la talla en las cuestiones más relevantes de nuestra trayectoria profesional.
Delega en abogados para proteger tu negocio
La protección legal de una empresa pasa en gran parte por el trabajo que desarrollan los abogados en Madrid en los que decidimos poner nuestra confianza. Es importante comentar que no todos los despachos son iguales, por lo que de cara a encontrar los mejores del sector corporativo, lo mejor es prestar atención al tipo de servicios que ofrecen. Las cuestiones empresariales no tienen nada que ver con las de un contexto, por ejemplo, familiar. Así que nuestro primer consejo es que analices en detalle sus áreas de especialidad y te quedes con quienes han demostrado su experiencia en este campo.
En este orden de ideas, la rama “corporate” resulta una de las más relevantes; gestionando así cuestiones tan importantes como lo es la fusión de dos grupos corporativos o la adquisición a través de la constitución de sociedades. En materia más rutinaria, el derecho tributario y el laboral son los más destacados; delegando así procesos como la declaración de los impuestos o la gestión tanto de nóminas como de empleados. Todo ello sin dejar de lado el marco del derecho penal que, en caso de no llevarse con los mejores expertos del sector, puede hacernos incurrir en delitos y vernos obligados a asumir penas de prisión.
Asimismo, es importante hablar de otras tareas como las asociadas al derecho concursal para quienes están en pleno concurso de acreedores, la litigación y arbitraje o en reestructuración. Como puedes observar, la lista de acciones que pueden desempeñar los bufetes de abogados es verdaderamente larga y depende de nosotros acudir a quienes efectivamente tienen un equipo preparado para atar todos los cabos. Hay mucho en juego en este tipo de litigios, así que nada de tratar de hacer frente a la adversidad por cuenta propia: esto nunca trae buenos resultados.
Servicios de auditoría para tu empresa
Otro de los recursos de índole legal que podemos llegar a necesitar a lo largo de nuestro tiempo como directivos de un negocio es lo que se conoce como auditoria empresa. Este servicio tiene como fin mejorar las compañías que lo contratan, llevando a cabo funciones esenciales para mantenerla a flote y prevenir todo tipo de riesgos judiciales. Por lo tanto, nuestro consejo es que no esperes a que las autoridades te soliciten la auditoría, sino que lo hagas por cuenta propia siempre que lo consideres necesario.
Este tipo de profesionales están especializados en auditorías tradicionales, en los reporting financieros, en la gestión de la salida a bolsa, en las emisiones de valores a escala nacional e internacional o en la propia asesoría financiera. De este modo, no solo se encargan de ejecutar un estudio sobre toda tu organización corporativa, sino que también plantean soluciones para que puedas crecer a corto y a largo plazo. Un recurso basado en la prevención de riesgos que otorga un rigor incontestable al estado financiero de la empresa de cara a socios, clientes e inversores.
La auditoría de las cuentas anuales, de los estados financieros intermedios, la operativa, la revisión de hechos concretos o la de procedimientos acordados suelen ser algunas de las gestiones más comunes en este tipo de despachos. Así como otros servicios de interés como la gestión de las subvenciones o los informes periciales, lo cual supone que nuestro emprendimiento va a estar siempre caracterizado por la transparencia.