Las autoridades de Estados Unidos están atentas a la situación de seguridad, debido a los flujos migratorios en el área de la selva del Darién, en Panamá, donde en el último año ha habido un repunte en la cifra de migrantes de diversos países que utilizan esta ruta para tratar de llegar a la nación norteamericana. Sin embargo, la alerta está puesta en la llegada a esa región de una serie de personajes de alta peligrosidad que pudieron haber salido desde España, con destino al continente americano y que habrían hecho saltar las alarmas.
En especial, se ha logrado la identificación de al menos siete ciudadanos de diferentes nacionalidades que aparecen registrados en la base de datos del Programa de Alerta sobre la Identificación Biométrica en la Migración Transnacional (BITMAP), un sistema de identificación que sirve a los agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) de Estados Unidos establecer contactos con diversos países para monitorizar las alertas de seguridad.
Durante los últimos meses las alertas saltaron por el paso de ciudadanos afganos, yemeníes, sirios y somalíes que han pasado por la selva del Darién y allí han sido plenamente identificados por las autoridades panameñas, quienes han reportado el tránsito a las autoridades norteamericanas. A estas personas que han señalado se les investiga por su presunta responsabilidad en la falsificación de documentos, tráfico de personas, homicidios y actos terroristas cometidos en sus países de origen.
Los reportes señalan que as autoridades identificaron recientemente a los ciudadanos somalíes Yaqub Abdullahi, Abdiwahab Mohamud-Gelle, Wohomed Adi-Adi, Zakariya Bakar-Amlin, con posibles evidencias de tráfico de personas y asesinato.
Estas personas fueron rastreadas por última vez saliendo del Hotel Real Victoria en Paso Canoas, en la frontera entre Costa Rica y Panamá y se presume que pretendían llegar hasta Estados Unidos. Supuestamente habrían pasado por los puntos de control que las autoridades de ambos países tienen instalados en la región como parte del monitoreo de migrantes que se mantiene de manera permanente en el área, debido al incremento en el paso por la región de ciudadanos venezolanos que salen huyendo de la dictadura de Nicolás Maduro.
La situación migratoria en la selva del Darién, en Panamá ha provocado que hasta las autoridades españolas, a través de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) se sumara a la colaboración, a través de donativos para la atención de los migrantes en la región, con el donativo de hasta un millón de euros para diversas organizaciones que se encargan de la atención y de la seguridad de las personas que atraviesan esta área de Centroamérica, con la intención de llegar a Estados Unidos.
Más recientemente las autoridades que se encargan de la atención de migrantes en el área han señalado que también tienen información del paso del Mohammed Farhan Ahmed Ghaleb, ciudadano yemení identificado el pasado 7 de febrero y liberado por las autoridades migratorias el 14 de febrero en el punto de control del Darién, en Panamá y alertaron que no se trataba de una coincidencia biométrica, pero que su nombre completo, fecha de nacimiento y nacionalidad coincidían con un registro de terroristas conocidos o sospechosos identificados internacionalmente.
El pasado 15 de febrero de 2023 también fue identificado por el sistema biométrico utilizado por las autoridades panameñas el ciudadano sirio Faraj Atia, quien aparecía en las bases de dato de identificación de Estados Unidos como un ciudadano de interés, debido a los múltiples registros en los que se le identificaba por tratar de cruzar fronteras con documentación fraudulenta.
De acuerdo con los reportes internacionales, desde 2016 las autoridades centroamericanas fueron notificadas de un grupo de seis ciudadanos sirios que viajaban con pasaportes falsos. En esa oportunidad fueron hallados en el aeropuerto de Tocumen en Panamá, después de llegar desde Quito, con un vuelo continuo desde Estambul, Turquía.
Posteriormente estos sujetos, en los que se encontraba Atia volaron a la ciudad de Guatemala, donde fueron entrevistados y se les encontró en posesión de pasaportes fraudulentos y robados del Reino Unido, Alemania, Francia, España y Estados Unidos. Posteriormente sujetos fueron retornados a Turquía vía Panamá.
En otro operativo, estos mismo sujetos fueron encontrados en Perú varios meses después y arrestados por posesión de pasaportes falsos, pero ahora las autoridades panameñas han logrado identificar solo a Atia, quien pretendía viajar nuevamente a través de Panamá, con destino a Estados Unidos y fue detectado por el sistema de identificación biométrica internacional.
Toda esta situación ha hecho que desde el país centroamericano hagan un llamado a las autoridades de los países que usualmente son utilizado como áreas de tránsito para estos ciudadanos que cuentan con alertas terroristas, con el propósito de que afinen sus estrategias de vigilancia, sobre todo en España, que es utilizado como la puerta de Europa hacia América, debido a la gran conectividad con a que cuenta, a través del aeropuerto Adolfo Suárez de Madrid – Barajas.