Los niños nacidos en España a lo largo del siglo XX han crecido con miedo al ‘hombre del saco’, una oscura figura de la leyenda negra española que, según el mito, raptaba a menores para asesinarlos y sacarles las tripas.
La leyenda del ‘hombre del saco’ no es más que la historia mil veces contada y exagerada del crimen de Gádor, un delito cometido en la provincia de Almería en el año 1910. Francisco Ortega, un almeriense de unos treinta años conocido como ‘El Moruno’, acudió a una curandera para poner remedio a su tuberculosis.