El ministro de Agricultura y Pesca, Luis Planas, se ha escorado tanto a la derecha que no le reconocen ni desde el PSOE. Fuentes de Ferraz aseguran que desde Moncloa no se sienten del todo incómodos con la presencia de Planas en el Consejo de Ministros, pero sí que detallan que la relación con Unidas Podemos se erosiona por segundos con la presencia de Planas en el Ministerio de Agricultura y Pesca. El ministro es un auténtico defensor de todas las causas de Vox. Al menos, tanto la pelea por el precio de los alimentos, como la caza del lobo ibérico así como la defensa de que los perros de caza sean una excepción en la ley de Ione Belarra. Planas es una auténtica piedra en el zapato del Gobierno porque impide la negociación con Podemos. Y las elecciones están a la vuelta de la esquina.
Luis Planas se ha negado incluso a tocar a los intermediarios de la cadena de distribución para que bajen los precios de los alimentos. Esta última reunión del ministro de Agricultura con todos los agentes implicados en el precio de la comida ha generado tanta fricción con Unidas Podemos que desde el PSOE están preocupados porque la «derechización» de Luis Planas acabe por generar una erosión entre las dos formaciones progresistas. La conclusión que sacó Luis Planas después de hablar con toda la cadena de distribución de alimentos es que no hay que hacer nada porque todo está encaminado a que en algún momento el precio de los alimentos baje. En resumen, no harán absolutamente nada por bajar el precio de algunos productos de los supermercados porque no quieren intervenir el mercado como sí piden desde Unidas Podemos.
Luis Planas no es un perfil precisamente amable con las pretensiones de Unidas Podemos en algunas cuestiones. Con la Ley de Bienestar Animal fue el que más apoyó las pretensiones de los cazadores a la hora de retirar a sus perros de las normas a las que están sujetas el resto de las mascotas. Planas siente auténtica pasión por las teorías que siguen los cazadores y ha conseguido que lo que es maltrato para un perro cualquiera no lo es si ese perro está destinado a la caza. Luis Planas fue el principal agente a la hora de convencer al Gobierno de que había que tomar este camino. Lo mismo con las cadenas de distribución de alimentos y con cualquier problema que haya con Unidas Podemos en temas que son de su competencia.
Que Luis Planas es de derechas no lo cuestiona nadie. Sus pretensiones ideológicas y sus posiciones políticas en cuestiones clave para el engrase de la coalición de Gobierno bien podrían condicionar la próxima investidura. Sin embargo, en Ferraz no tienen nada claro la idea de tocar a Luis Planas. Las muchas veces que se ha especulado con la idea de que se lleve a cabo la crisis de Gobierno, el nombre de este ministro no estuvo entre los señalados para abandonar la casa tan pronto como se llevara a cabo.
Ahora mismo, Luis Planas es uno de esos socialistas moderados, por decir algo, que se han convertido en un problema para negociar con Unidas Podemos. La realidad es que fuentes de Ferraz dejan más que claro que en el Gobierno necesitan perfiles así para defender una posición más centrada. Otros ministros como el de Seguridad Social, José Luis Escrivá, o la vicepresidenta del Gobierno y ministra de Economía, Nadia Calviño, acompañan al de Agricultura en su pretensión por centrar la imagen de un Ejecutivo escorado a la izquierda.
Donde sí surgen las dudas en Ferraz es cuando se habla de la posibilidad de que Luis Planas repita en el Gobierno como ministro. Aún así, cierto es que ganaderos y pescadores no están del todo disconformes con el trabajo de Planas al frente del ministerio.
