La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, está de enhorabuena. El PSOE es un partido federal que tiene muchos contrapesos internos, pero que hay dos facciones que tienen mucho que decir. La primera y la más importante pese a sus pésimos resultados es la de Andalucía. Y la segunda, que siempre sacan un ministerio como forma de pago, es el PSC. Para que Pedro Sánchez tenga el control del partido necesita que estos «barones» internos le den su apoyo. Pues bien, dado el ridículo peso de Juan Espadas en el PSOE de Andalucía, el presidente del Ejecutivo ha decidido pagar la cuota de partido a los andaluces dando más protagonismo y peso durante esta campaña a María Jesús Montero. No es que sea especialmente importante en el PSOE, pero sí que goza de la confianza del presidente. La mala noticia es para un Espadas que está más de salida que cualquier otro dirigente socialista.
Se la verá más y sobretodo se le dará más protagonismo en la campaña electoral como «portavoz reciclada» del PSOE. Ya se empieza a notar que Pedro Sánchez ha dado capacidad de mando y protagonismo a más de una persona en el partido, pero también se ha visto que María Jesús Montero, enterrada desde que dejó de forma oficial la portavocía del Gobierno, ha recuperado su imagen ante las cámaras para defender al partido. La realidad es que Pedro Sánchez necesita gente que controle el PSOE de Andalucía entre sus filas. Dado que Juan Espadas es un cero a la izquierda, el presidente ha tirado de un clásico para pagar la cuota este año. María Jesús Montero vuelve a estar en primera línea de playa, aunque solo será previsiblemente durante la campaña electoral. Durante esta que se acerca con las elecciones municipales y autonómicas de mayo y durante la que tendrá lugar previsiblemente en noviembre y diciembre para los comicios generales.
La dirigente andaluza ha reavivado además un debate en Ferraz. ¿Quién sustituirá a Juan Espadas como candidato socialista en Andalucía? Que va a repetir como ministra no es algo que esté en cuestión. Todos entienden que goza de la confianza del presidente del Gobierno ya que su nombre ni siquiera sonó para la crisis de Gobierno que se esperaba para este mes. El hecho de que no tuviera lugar no ha cambiado nada respecto a la situación de los ministros señalados, pero María Jesús Montero siempre ha estado en una buena posición dentro del PSOE. Ahora, Sánchez entiende que es la mejor persona con quien pagar la cuota a PSOE de Andalucía y hay quien piensa que en un futuro podría jubilarse como candidata del partido en esta comunidad autónoma. Solo quedaría solucionar las pretensiones que tiene Felipe Sicilia, otro peso pesado del partido que goza de la confianza de Pedro Sánchez.
Ver a María Jesús Montero se va a convertir en norma, tal y como aseguran fuentes del PSOE en Madrid. Ya le han empezado a dar galones y Sánchez no los dará a la ligera. Junto a la ministra de Hacienda, hay otros ministros y diputados que tendrán la bendición del líder «todopoderoso» para que puedan hablar ante las cámaras y conseguir mejorar la imagen del partido antes de las elecciones. En Ferraz hay quien considera que María Jesús Montero no es la ideal para esta empresa, pero todos reconocen que goza de la confianza del presidente del Ejecutivo. Su nombre nunca estuvo en la rampa de salida cuando se habló con fuerza de una crisis de Gobierno y es quien ayuda al presidente a controlar el PSOE de Andalucía, uno de los más beligerantes y de mayor peso en la formación a nivel nacional.
