Vox tiene un serio enfado con Sergio Sayas, el diputado que ahora se ha ido a dar la cara por el Partido Popular. Llevaban meses hablando de la posibilidad de que fichara por el partido de Santiago Abascal, pero finalmente han visto un caballo ganador en el PP. Sergio Sayas, antes diputado de UPN, ahora forma parte del Partido Popular pese a que desde Vox vendieron en su momento que formaría parte de su equipo. No dieron bombo a este fichaje de forma oficial porque quedaban algunos flecos, pero de repente han visto como el propio Sayas ha tomado la decisión unilateral de dar la espalda a la extrema derecha para dejarse querer por el PP. Los populares, por supuesto, siguen en sus trece de vender la moderación como vía a seguir. Y Sayas ahora tiene que dar una imagen distinta a la que Vox quería que diese bajo sus filas.
Sergio Sayas ha jugado a dos bandas durante mucho tiempo porque no sabía qué sería de su vida política después de que saliera de UPN. El diputado coqueteó con Vox porque fue uno de los primeros partidos en ponerse en contacto con él y en mirar la posibilidad de ficharle como golpe de efecto. Es cierto que Sayas había lanzado una serie de discursos que le habían dado notoriedad en los medios y es cierto que tiene buena relación con algunos periodistas de mucha repercusión (especialmente en Twitter) que le han facilitado tener contacto con pesos pesados de la política, especialmente en Vox. Pero el interés del Partido Popular ha hecho que Sergio Sayas, exdiputado de UPN, diera la espalda a Vox para dejarse querer por los de Alberto Núñez Feijoo y su equipo más cercano.
En Vox el enfado es importante porque fueron los primeros que se acercaron a Sergio Sayas gracias a un intermediario periodista. Pero lo cierto es que no parece que para el diputado haya sido la opción más atractiva pese a que, según detallan fuentes de la formación de extrema derecha, se dejó querer más de la cuenta e incluso llegó a verbalizar que sí que acabaría dando el salto al equipo de Santiago Abascal. El problema es que los planes de Sayas han dado un giro de 180 grados en el momento en el que el PP de Feijoo le ha tendido la mano y le ha ofrecido un puesto en las listas. Al final, se trata de repescar esa idea de Pablo Casado y potenciarla con perfiles mediáticos. Sergio Sayas suma, a ojos del equipo de Feijoo, pero sobretodo hace daño a un Vox que quería contar con él en su equipo.
Sayas no parece estar afectado por haberle dado la espalda a Vox, de hecho considera que ahora tendrá que enfrentarse a ellos en algún que otro contexto porque la doctrina impuesta por Génova es la de no dar ni agua a un Vox que busca arañar votos de su ala dura. Feijoo quiere estar centrado y sobretodo no quiere problemas con sus barones, es decir, que no quiere que pacten de ninguna manera con los de Santiago Abascal para evitar problemas como los que se están dejando ver en Castilla y León a causa de la reforma de la ley del aborto que ha impulsado el vicepresidente autonómico. Sergio Sayas no tiene ningún problema, según detallan desde el PP, en hacer gala de esa actitud moderada que quiere Feijoo, pero en Vox se sienten ofendidos por lo mal que han ido los tanteos y las negociaciones previas.
Sayas era uno de los fichajes potenciales de Vox, pero había otros que también estaban en la rampa de salida para ver si consiguen dar un golpe de efecto y poner sobre la mesa nuevas caras que den otra dimensión de popularidad al partido.