Page llama al PSOE a «pasar página» del pacto «encubierto» con Bildu, acuerdo donde ve más cómodo a Podemos

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha considerado que el PSOE a nivel estatal «tendrá que pasar página» del pacto suscrito con Bildu para garantizar su abstención ante la última prórroga del estado de alarma con la reforma laboral de telón de fondo, un pacto que «estuvo encubierto hasta que se votó, algo que lo desautoriza en las formas».

En una entrevista con Trece recogida por Europa Press, ha dicho al respecto que Bildu «podría haber votado a favor de salvar vidas a cambio de nada» después de que en su pasado «ha defendido y amparado» a ETA, «cuando no directamente atentando».

«No creo que el Gobierno del PSOE se pueda mantener en esa línea», aunque seguro que Podemos puede verlo «desde otro punto de vista», ya que «siempre ha hablado muy generosamente del entorno proetarra».

En su opinión, un Gobierno tiene que estar «muy desesperado» para tener que aceptar pactar con Bildu, algo que en todo caso «no es disculpa ni coartada. Según ha dicho, esa desesperación a la que achaca el pacto in extremis pasaba también «por no fiarse de los compromisos pactados» antes de la votación, en alusión a Cs.

«No creo que la sociedad española ni el conjunto de los partidos vayan a blanquear a Bildu. Me repele hablar de vidas con alguien que ha hecho del ataque a la vida de otras personas su instinto político», ha ahondado. Abundando con la reforma laboral, ha dicho que antes de entrar en ese fondo «habría que respetar a la enfermedad y al virus».

Con todo, ha recordado la problemática de que haya dos partidos en el Gobierno, ya que «Podemos nació para acabar con el PSOE, aunque esté en el Gobierno con el PSOE».

Se ha puesto como ejemplo, ya que gobernó el Ayuntamiento de Toledo con IU de la mano y la Comunidad Autónoma la pasada legislatura con Podemos. «Sé lo que le queda por pasar al Gobierno», ha lamentado, dejando claro que en todo caso «hay un solo presidente y el Gobierno es mayoritariamente del PSOE».

«Visto con perspectiva es lamentable que con esta situación no se haya dejado a parte la diatriba política, demagógica y oportunista», ha aseverado el presidente, que lamente que «haya mucha prisa para sacar rendimiento político» a las consecuencias del virus.

Al Gobierno «se le pueden criticar muchas cosas» y ese debate «podrá venir o no», pero ahora «toca pasar página del drama» social, algo que «se hará sin ninguna duda». Y toda vez que se levante el estado de alarma, «ya se podrá hablar en otras condiciones».

De momento, es «todo muy prematuro», desde acciones del Gobierno hasta críticas de la oposición. Cuando todo pase «se podrán tomar conclusiones», pero de momento hay que «calentar motores para salir de la crisis económica».

PIDE «NO BAJAR LA GUARDIA BAJO NINGÚN CONCEPTO»

En otro orden de cosas, García-Page ha dado por hecho que a finales de junio terminarán las restricciones de movilidad en la Comunidad Autónoma, y si bien ha considerado que el virus está «bastante acorralado», todavía no es partidario ni de «echar campanas al vuelo» ni de «bajar la guardia bajo ningún concepto».

En opinión del presidente, el sector turístico se va a haber muy afectado, ya que «depende de la confianza y del miedo»; ante lo que ha contrapuesto desde el punto de vista optimista que la actividad económica se podrá recuperar al 95%.

«España tiene una economía más flexible, seguro que el sector servicios, en un plazo a 2021, va a reaccionar económicamente de forma positiva», ha aseverado, agregando que la reacción de la sociedad durante el confinamiento, después de servir de «ejemplo» para una clase política que «no ha estado a la altura», hacer presuponer «una buena base» para salir adelante.