Uno de los aspectos más importantes de la salud emocional es sentirse seguro con los demás, aunque muchas veces las emociones hacen que la relación con uno mismo y con otros se convierta en problemática.
En este aspecto, la bioconducta es una herramienta que estudia el impacto de las emociones y los procesos traumáticos somatizados en el cuerpo, permitiendo identificar la llamada enfermedad del síntoma. Para ello, en El Nostre Espai de Salut de Sabadell se utilizan distintas técnicas para observar cómo la emoción genera diferencias en la localización cerebral y en la relación de la comunicación con el cuerpo.
¿Cómo identificar la enfermedad del síntoma?
De acuerdo con el psicoterapeuta e investigador en biomedicina José Manuel Morales, la expresión del cuerpo cuenta muchas historias con relación a las emociones. Estas se encuentran presentes en cada acción, propiciando en ocasiones relaciones problemáticas debido a la pérdida o amenaza de ser rechazado, o bien al temor a la desaprobación y al sentimiento de abandono, con miedo de no tener las herramientas para sentirse una persona segura y protegida. En este marco, una de las técnicas que permite crear un vínculo entre el cuerpo y la mente es la bioconducta.
De esta forma, es posible establecer una relación entre las capas embriológicas para reestructurar la emoción desde los 5 cerebros. Para tal fin, el terapeuta puede reorganizar los sentimientos y necesidades que tiene cada parte y capa del cuerpo, identificando la enfermedad del síntoma, la cual nace muchas veces de emociones no expresadas que provocan inseguridad, indecisión, bloqueos y problemas de comunicación.
Estudios sobre la enfermedad del síntoma, en El Nostre Espai de Salut
Con diferentes herramientas como la Terapia de Bioconducta y Propiocepción (TBP) y el Método de Autorregulación Emocional (MAE), María José Cruz Moreno y José Manuel Morales Fernández realizan estudios sobre la enfermedad del síntoma en El Nostre Espai de Salut de Sabadell.
Allí han podido observar las diferencias en la localización cerebral y en la relación de la comunicación con el cuerpo cuando se produce una emoción, con casos en los que el trauma somatiza e impacta sobre paralizando a las personas y variando el consumo bioeléctrico humano. Así, la bioconducta permite establecer conexiones seguras para sentirse con confianza frente a otras personas y llevar una vida satisfactoria y con salud emocional.
Con varios retiros preparados para mejorar la comunicación entre mente, alma y cuerpo, José Manuel Morales y María José Cruz reciben personas de toda España y Andorra en el Nostre Espai de Salut.
