Alejandro Fernández se perfila como el claro favorito a suceder al líder de los populares en Cataluña, Xavier García Albiol, una vez que este último ha renunciado a la presidencia del PP en esta comunidad autónoma.
Fernández, portavoz del PP en el Parlament catalán, aventaja por ahora con gran distancia a otros posibles candidatos, como podría ser la exministra de Sanidad, Dolors Montserrat, en las quinielas de las que se habla en el Partido Popular.
Los pilares principales de la candidatura de Alejandro Fernández son su control de la militancia en Cataluña y haber sido el hombre que apoyó a Pablo Casado en esta comunidad durante el proceso de primarias que llevaron a este último a la presidencia del PP nacional.
En aquellas primarias, Pablo Casado obtuvo el 49% de los votos de los militantes en Cataluña, lo que supuso un gran triunfo para el trabajo realizado por Fernández. María Dolores de Cospedal obtuvo entonces el 25% de los sufragios y Soraya Sáenz de Santamaría se quedó en el 20%.
LA VENTAJA DE ALEJANDRO FERNÁNDEZ
Aunque Montserrat apoyó en la primera fase de las primarias a Cospedal, luego se pasó al bando de Casado una vez que esta se vio fuera de la segunda vuelta. La primera es ahora una de las personas de confianza de Casado en Madrid, pero este mismo hecho puede ser un argumento más contra su posible candidatura para Cataluña, al perder el nuevo presidente del PP a una de las caras que sustentan la actual oposición al Gobierno de Pedro Sánchez.
Una diferencia cualitativa entre Alejandro Fernández y Dolors Montserrat es el hecho de que el primero es diputado en el Parlament. En un momento de efervescencia política en Cataluña, la posibilidad de que el nuevo líder del Partido Popular no esté presente en el hemiciclo catalán sería un hándicap para su proyección pública y un lastre para el protagonismo que pretende tener el PP catalán en los próximos meses.
De cara a la elección del nuevo líder del PP catalán, primero habrá que ver si hay más de un candidato a presidir el PP catalán. En el caso de que finalmente haya dos o más candidatos, todos ellos deberán presentar los avales requeridos y luego someterse al proceso mixto de primarias y votación de compromisarios.
A la votación sólo se podrán pronunciar los afiliados registrados y al corriente de pago de sus cuotas dentro del partido. Al igual que en el congreso nacional del PP, en las primarias habrá doble urna para que las bases elijan a los candidatos que estarán en la lucha final y a los compromisarios que, en último caso, decidirán al sucesor de Albiol.
Si un aspirante logra más del 50% de los votos y 15 puntos de ventaja sobre el segundo aspirante, será inmediatamente proclamado candidato único. Si no es así, en el posterior congreso del PP catalán habrá dos aspirantes y los compromisarios tendrán la última palabra en una votación en urna.