“Invitaciones oficiales” es la formula a la que se acoge el eurodiputado de Ciudadanos, José Ramón Bauzá para cubrir el numeroso rastro en redes sociales de viajes de lujo a Qatar y países del entorno, como Dubai. Este tipo de actividades están bajo la lupa del Parlamento Europeo, que ha vivido la conmoción de las investigaciones por el pago de presuntos sobornos por parte de Qatar a varios europarlamentarios y sus equipos. Viajes como el que hizo el propio Bauzá el pasado mes de mayo junto a la vicepresidenta detenida por la policía, la socialista griega Eva Kaili. La policía belga registró este lunes por la tarde dependencias del Parlamento Europeo. La investigación sigue bajo secreto.
Bauzá se ha apresurado a aclarar que él no ha recibido emolumento alguno por parte de Qatar, y que sus viajes han sido “invitaciones oficiales”. Es difícil borrar el rastro de viajes, intervenciones públicas en favor de Qatar, o de un foro a todo lujo efectuado en uno de los hoteles más selectos de Madrid, el Four Seasons, sobre turismo y aviación, en el que no faltó un ponente de excepción procedente de Qatar, el vicepresidente de su línea aérea.
PRESIDENTE DE LOS AMIGOS DE QATAR
Bauzá, ex presidente de Baleares y ex senador, es uno de los renegados del Partido Popular y reclutado por Ciudadanos para las elecciones europeas, en la ola creciente de Albert Rivera en 2019. Pero no tardó en pisar fuerte en el Parlamento Europeo, precisamente en torno a Qatar. Diputado bisoño en Bruselas, preside ni más ni menos que el Grupo de Amistad Qatarí con la Unión Europea. Uno de esos grupos informales que se parecen a un lobby que proliferan en los pasillos del parlamento Europeo, en Bruselas.
Los Grupos de Amistad no son oficiales, por lo que no figuran en las listas oficiales del Parlamento Europeo. Bauzá, balear, farmacéutico de profesión, reservista de las Fuerzas Armadas, decidió al llegar a Bruselas sorprendentemente que iba a abrazar la causa qatarí. En torno a esta causa ha desplegado una buena parte de sus intervenciones en el parlamento Europeo, siempre en la línea de “no bloquear” los, a su juicio, progresos de la monarquía del Golfo. En su entorno, empeñado en poner en valor todo lo que llega de Qatar, se ha llegado incluso a defender que las mujeres qataríes no están tan huérfanas de derechos como parece.
Bauzá además ha entrado en el asunto qatarí con una doble vertiente, dada también su dedicación a patrocinar y defender a la aviación comercial.
UN FORO EN EL FOUR SEASSONS
José Ramón Bauzá apareció este mes de marzo como organizador de un hasta el momento inédito foro que arrancaba como primera edición en Madrid, el “Foro de Aviación y Turismo”. La cita, que no aclaraba quién era el organizador (la prensa del momento se divide entre el propio Bauza y Ciudadanos), contaba con una participación de excepción: Javier Sánchez-Prieto, CEO de Iberia; Willie Walsh, director general de IATA; Juan Molas, presidente de la Mesa del Turismo de España; Jaime García-Calzada, presidente del Consejo de Turismo de la CEOE, y Begoña Villacís, vicealcaldesa de Madrid. Y claro, Paul Roberts Starrs, vicepresidente de Qatar Airways.
Bauzá, además de proponer un “libro blanco del turismo”, siguió en su misma línea a favor de la aviación comercial: «Si cada vez ponemos más impuestos y trabas, seremos menos eficientes”. El foro se celebró con poca contención de gastos, ya que se llevó a cabo en el recién estrenado hotel de cinco estrellas Four Seasons, quizás el más lujoso de Madrid. En las imágenes de este foro no aparece patrocinio alguno.
LA DELEGACIÓN EN QATAR
Otro importante foro de la aviación comercial, CAPA, lo levó a Qatar en 2020. Lo llamativo es que a ese viaje, en el que tenía una simple intervención, se llevó a personal de su equipo. En RRSS constan más viajes de su equipo, y políticos afines a su equipo, a las monarquías del Golfo Pérsico.
Precisamente una de esas monarquías, Dubai, fue el destino de un viaje junto a Eva Kaili y otros dos eurodiputados este pasado mes de mayo. Un encuentro de alto nivel con representantes de Dubai, para hablar de cambio climático y derechos de la mujer. De hecho, formó parte de la que se llamó Delegación para las Relaciones con la Península Árabe.
José Ramón Bauzá es un habitual en foros y simposios en los que se defiende la postura de Qatar, e incluso en los que se patrocina el mundial de fútbol que se está celebrando estos días.
El Mundial de fútbol es un paso estratégico de Qatar e su rehabilitación internacional, pero a la vez ha sido lo que ha dado evidencias de los problemas que tiene su normalización internacional. Los sobornos para conseguir organizar el evento provocaron un terremoto en la FIFA, que acabó incluso con el reinado de Blatter.
Pero la construcción de estados e infraestructuras y las denuncias sobre las terribles condiciones y muertes de los miles de obreros que han trabajado en ellas han requerido un nuevo esfuerzo de Qatar. En el Parlamento Europeo hay una división clara, entre eurodiputados que denuncian la situación de Qatar y los que la encubren. Bauzá es quizás el más señalado y activo de estos últimos.
Bauzá no tardó en intentar defenderse. Lo hizo usando su red social favorita, en la que están todos sus viajes: Twitter: «He defendido en el Parlamento Europeo que los avances de Qatar son una buena noticia para Oriente Medio. Lo creía y lo creo. Ahora bien: si se demuestra que han pagado a algún diputado o asesor para influir en ellos a su favor, hay que ser absolutamente contundente contra todos. Huelga decirlo, pero por si acaso lo dejo aquí por escrito: Jamás he recibido, ni siquiera me han ofrecido, ni un solo € por defender absolutamente nada. Todas mis reuniones han sido públicas, y cuando he viajado a Qatar lo he hecho siempre con invitación oficial. La dignidad de las instituciones, que es el sustento último de la democracia, está por encima de todo. En mi grupo apoyaremos un debate en Pleno y una investigación al respecto para aclarar hasta la última duda. Tolerancia cero con la corrupción».
Deslumbrantes edificios, lujos asiáticos, viajes en primera clase, hoteles de la máxima categoría mundial, restaurantes de todos los colores. Demasiado atractivo para resistirse a ir a verlo y contarlo en sus redes sociales.
