Es probable que a lo largo de la mañana muchos usuarios de la plataforma de mensajería WhatsApp se hayan encontrado con problemas a la hora de utilizar la exitosa red social. Un fallo que en origen parecía afectar únicamente a los grupos de la aplicación, pero que poco a poco se ha ido extendido a todas las conversaciones sin importar su origen.
Probablemente esta no sea la primera vez que WhatsApp da errores de manera puntual, pero en este caso la cosa parece haber ido bastante más allá. A partir de aproximadamente las 9 de la mañana (hora en España), muchas localizaciones en todo el mundo han sufrido el mismo contratiempo. Es decir, que personas de distintos países se han visto incapaces de enviar ni recibir ningún tipo de mensaje. Un percance significativo, si tenemos en cuenta que se trata de una de las aplicaciones más utilizadas por millones de usuarios, y no en pocas ocasiones para la comunicación a nivel profesional.
Como cabría esperar en este tipo de situaciones, las respuestas al incidente no se han hecho esperar. Teniendo en cuenta que las demás redes sociales, como Twitter y Facebook, no han padecido ninguna caída similar, no han faltado los usuarios que han compartido su sorpresa en ellas, pero tampoco han faltado quienes han decidido tomarse la situación con sentido del humor y bromear al respecto. Al fin y al cabo, tampoco es la primera vez que WhatsApp sufre una avería similar, si bien no suele ser frecuente que está se generalice a todo el globo, ni que tarde tanto en solucionarse.
El silencio de Meta
Los motivos de la avería que ha sufrido WhatsApp se desconocen, al menos en el momento de escribir estas líneas. Lo cual viene a significar algo muy sencillo: Meta, responsables de la plataforma, no han revelado la causa. O bien porque no lo saben o quizá porque todavía están trabajando en ello y no han tenido tiempo. Sea como fuera, ese silencio también ha incentivado el ingenio de no pocos usuarios, que a través de otras vías de comunicación han apuntado a los más diversos orígenes, la mayoría de las veces con ocurrencias disparatadas.
De la misma forma, este tipo de “apagones”, aunque sean solo de una red en particular, suelen despertar los alarmismos (fundados o no, quién sabe) de todos aquellos que critican la gran dependencia que hoy en día se tiene no ya de las nuevas tecnologías e Internet, sino también de aplicaciones en concreto, como es el caso de WhatsApp. Un debate que no es nuevo pero que ya se ha dejado ver también en otras redes sociales.
Por lo demás, la mayoría de la gente que se ha despertado o se ha encontrado de repente con lo sucedido, se ha encontrado con el ícono del reloj donde deberían estar los populares palitos que simbolizan la buena entrega de un mensaje, ya sea escrito o de voz, en los millones de conversaciones que en cada momento se llevan a cabo por WhatsApp en todos los rincones del globo.
Twitter ha sido, al menos en nuestro país, la red social en la que más repercusión ha habido sobre la caída de WhatsApp. De hecho, uno podría incluso pensar que se ha beneficiado, y que mucha de la gente que pasa la mañana hablando con unos y con otros por WhatsApp ha recurrido a Twitter, tanto para informarse de si lo que estaba sucediendo era algo común a todos o no, y para entretenerse también, cabe suponer.
Lo que está claro es que, se trate o no de algo puntual, con sucesos como este también se silencia sobremanera la voz de la gente, sea o no de forma intencionada.
