Desde el pasado lunes 17 de octubre se está desarrollando en las islas Canarias el ejercicio Sirio 22, que son las mayores maniobras que desarrolla anualmente el Ejército del Aire y del Espacio, y que este año destacan por la previo despliegue a dicho lejano escenario poniendo a prueba su carácter expedicionario.
Desde hace semanas la Institución lleva desplegando equipos y personal, tanto por vía marítima mediante el empleo del buque de apoyo logístico “Ysabel” del Ejército de Tierra (ET); como con sus aviones de transporte, que han realizado múltiples vuelos hasta la base aérea de Gando (Gran Canaria) y el aeródromo militar de Lanzarote. El Sirio 22 implica, durante dos semanas, a una amplia gama de aeronaves del Ejército del Aire y del Espacio, que van desde los cazabombarderos Eurofighter y EF-18M, que se sumaran a los muy veteranos F/A-18A con base en Gando, a los transportes tácticos Airbus Defence & Space (DS) A400M y C295 pasando por los modernos helicópteros NH90, etc. También desde la referida instalación lanzaroteña están participando los aviones remotamente pilotados o Remotely Piloted Aircraft Systems (RPAS) MQ-9 Predator B, previamente enviados allí a finales de septiembre, como ya detalló Moncloa.com.
Respecto a los medios de apoyo han llegado a Lanzarote tres aviones de los aliados de la OTAN especializados en el rol de reabastecimiento aéreo, para llevar a cabo el denominado Entrenamiento de Reabastecimiento Aéreo Europeo o European Air to Air Refueling Training (EART) 2022, que se coordina con la actividad diaria del Sirio 22, y que ha sido planificado, organizado y dirigido por parte del Mando Aéreo de Transporte Europeo o European Air Transport Command (EATC). En concreto el pasado fin de semana han llegado a Lanzarote, los tres citados aviones cisterna o de Air to Air Refuelling (AAR) de la Alianza Atlántica, que son: un Boeing KC-767A italiano, un Airbus DS A330 de su variante de reabastecimiento-transporte o Multi-Role Tanker Transport (MRTT) francés, y un A310 MRTT canadiense, además de sus correspondientes tripulaciones, junto con mentores de Australia y del centro europeo de coordinación de movimientos o Movement Coordination Centre Europe (MCCE).
El Ejército del Aire y del Espacio, además de la misión de defensa del espacio aéreo de soberanía nacional que es permanentemente o 24/7 (24 horas del día las siete jornadas de la semana), debe mantener sus unidades adiestradas para su empleo en las operaciones que se determine. Así, en concreto el Mando Aéreo de Combate (MACOM) es el encargado de realizar un adiestramiento cada vez más especializado y realista y, en consecuencia, de organizar este ejercicio. El Sirio sirve para instruir y evaluar a las unidades aéreas de combate, de apoyo al combate y del sistema de mando y control, con el fin de garantizar su preparación para la realización de operaciones, así como para mantener la disponibilidad operativa y el estado de alistamiento requerido para constituir, de forma rápida y eficaz, las organizaciones operativas aéreas.
Adicionalmente, el Sirio 22 continuará incluyendo la implementación del nuevo modelo de evaluación táctica o Tactical Evaluation (TACEVAL) de la OTAN, según el cual las naciones pasan a evaluar en sus ejercicios nacionales las capacidades ofrecidas a las Fuerzas de Respuesta de la OTAN avanzada o Enhanced NATO Response Forces (eNRF), para el año siguiente. Para dicha evaluación, paralela a la que realiza el MACOM, y certificación, en concreto de un supuesto de capacidades de operaciones especiales integrado en el Sirio 22, se han desplazado a Canarias también un núcleo de profesionales evaluadores del Mando Aéreo Aliado o Allied Air Command (AIRCOM) de la Alianza Atlántica.
En el ejercicio participan en torno a 2.000 personas de 21 unidades del Ejército del Aire y del Espacio, que suman un total de 35 aeronaves de sus diferentes Alas de Combate y de Transporte.
Por otro lado, el Sirio 22 incluye el adiestramiento de la capacidad expedicionaria del Ejercito del Aire y del Espacio, mediante la instalación de una base aérea desplegable en las referidas instalaciones de Gando, que incluyen un importante despliegue de fuerzas de seguridad, que aseguran dicho cuartel general proyectado desde la Península.
El Sirio 22 es un ejercicio muy complejo de por sí y más por organizarse en el archipiélago canario, con lo que conlleva a nivel logístico, tanto por el traslado y sostenimiento de material como de todo el personal participante. La realización de este ejercicio es de suma importancia para el Ejercito del Aire y del Espacio para el cumplimiento de sus misiones.