Los grandes triunfadores de la noche electoral -además de Pedro Sánchez- son sin lugar a duda los partidos nacionalistas. Esquerra consigue el mejor resultado de sus historia -15 escaños- y tanto el PNV como como EH Bildu ganan peso en el País Vasco -entre los dos suman 10 de los 18 diputados de la comunidad autónoma-. El PSOE salva la cara en los territorios independentistas, Ciudadanos se desploma -sobre todo en Cataluñá- y el papel de PP ha pasado a ser residual.
Un preso, sí, un preso es desde este domingo una de las grandes amenazas del Gobierno Central. Parece una broma e incluso irreal que una persona que vive privada de su libertad pueda suponer un peligro para la estabilidad del país. Pero lo cierto es que desde este domingo, Junqueras es sin lugar uno de los grandes vencedores de la noche electoral y un quebradero de cabeza para Pedro Sánchez.
Desde la cárcel, Junqueras ha conseguido el mejor resultado histórico de la formación que lidera. Esquerra Republicana ha alcanzado 15 escaños -seis más que en los anteriores comicios generales. En total, casi 900.000 votos que han aupado al reo a un lugar privilegiado en cualquier hipotética negociación con Sánchez. El peso de la figura de Junqueras, líder ERC, se comprueba al observar cómo se ha quedado a tan sólo 9 escaños de un partido generalista como Vox.
Además, la aplastante victoria de Esquerra se produce justo dos años después de que Ines Arrimadas, líder de Ciudadanos en Cataluña, ganara las elecciones autonómicas del 2017. Desde entonces los nacionalistas no han dejado de ganar terreno a la misma velocidad que la formación naranja la perdía. De hecho, en estas Elecciones Generales los de Rivera sólo han conseguido sumar cinco diputados situándose así como quinta fuerza política.
Con los resultados en la mano, Junqueras ha conseguido vencer a Ciudadanos en el territorio donde mejores resultados ha cosechado y de paso ha derrocado a su ‘rival’, Carles Puigdemont. Porque el expresident de la Generalitat sólo ha conseguido siete escaños, uno menos que en las Elecciones Generales de 2015, cuando se presentaron bajo las siglas de Convergencia. De este modo, Junqueras se carga a dos pájaros de un tiro, a Rivera por un lado y a su ‘compañero’ en la lucha por la independencia, Puigdemont. El preso gana, el fugado pierde. El mártir vence, el timorato sale derrotado.
EL PSOE FRENA LA SANGRÍA EN CATALUÑA
El que ha conseguido salvar la cara en Cataluña es el gran triunfador de la noche, el PSOE. Sánchez ha conseguido 12 escaños -cinco más que en los anteriores comicios generales- y ha frenado la sangría que sufría el PSC desde las últimas autonómicas cuando pasó de 25 a 17 asientos en la Generalitat. Así, Iceta vuelve a ganar protagonismo en una comunidad donde Ciudadanos se presentaba como la única alternativa al nacionalismo. Además, los socialistas pueden presumir de haberse quedado a menos de 100.000 votos de Junqueras.
La formación blanca de Podemos en Cataluña es sin la tercera gran derrotada: de 12 diputados pasa a contar con 7. Es decir justo los cinco escaños que gana el PSOE. Arimética pura y dura. Por su parte, el PP se descalabra en Cataluña. El problema es que esto no es noticia porque lo ha hecho en todos los territorios del país. En este caso, los ‘populares’ pasan de 6 escaños a uno sólo y juega así un papel residual. Victoria moral es la de Vox, que ha conseguido colar un diputado en la comunidad autónoma donde más odio acumula.
EL PNV MANDA EN EL PAÍS VASCO Y BILDU ROZA UN DIPUTADO EN NAVARRA
En el Norte, los nacionalistas también se erigen como los grandes vencedores. En este caso son el PNV y EH Bildu los que refuerzan sus papeles en el País Vasco. La primera formación ha conseguido seis escaños y la segunda cuatro. En total 10 de 18 escaños de la comunidad, más de 50%. Además Bildu suma otro diputado más, y forma así grupo parlamentario gracias, en Navarra.
Con respecto a los anteriores comicios del año 2015, el PNV suma uno más y Bildu dos más, aunque hasta el final de la noche pudieron ser tres con el diputado que sumaba la formación en Navarra. Al final, en el pitido final se lo arrebató Podemos. En cuanto a votos, los primeros acaparan el 31% y los segundos el 16%, en el País Vasco. Aquí, el PSOE vuelve a sortear el ‘tsunami’ nacionalista y logra rascar cuatro escaños, los mismos que Podemos, que pierden dos desde las últimas elecciones generales. El PP desaparece del mapa, Ciudadanos no hace acto de presencia y Vox no consigue repetir la gesta de Catañuña, donde suma un diputado.
EL PP PIERDE LA BATALLA NACIONALISTA
De todos estos datos se desprende un fervor nacionalista, que coincide además con un aumento más que notable de la participación. En Cataluña se ha pasado del 63,42% al 77,59% y en el País Vasco del 65,17% al 74,53%. Los votantes que abogan por la independencia de estos territorios han salido a la calle y eso se ha reflejado en los resultados. El efecto ‘Vox’ lo llaman algunos. Un efecto que ha borrado del mapa al Partido Popular en los territorios nacionalistas y deja tiritando a Ciudadanos.