El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha afirmado este miércoles que la suspensión definitiva de las Fallas 2020 es «una medida histórica», un «indulto general que nadie hubiera deseado», y ha instado a pensar «ya» en 2021.
«La suspensión definitiva de las Fallas 2020, acordada por València, es una medida histórica que nos duele a centenares de miles de personas. Tanto trabajo, tanta ilusión… un indulto general que nadie hubiera deseado. Pensemos ya en 2021, quedan 310 días para la Cremà», ha escrito en sus redes sociales junto a una fotografía de un monumento en llamas.
Además de resaltar que «las Fallas de Torrent, Gandia, Alzira, Alaquàs o Burriana también han sido canceladas por responsabilidad y salud pública», ha querido enviar un abrazo a «todas las personas que han salido perjudicadas».
«Hacer crecer la ilusión: ese es el espíritu hasta 2021 de nuestro patrimonio cultural y festivo», ha agregado el jefe del Consell.
Las Fallas se suman a la suspensión de otras fiestas de la Comunitat Valenciana, como la Magdalena de Castelló y les Fogueres de Alicante, que se decidieron suspender este martes.
La crisis sanitaria global desatada por la Covid-19 provocó en marzo que se aplazaran las Fallas de València con julio como fecha provisional. Las fiestas josefinas solo habían sido paralizadas anteriormente por conflictos bélicos y una tasa en el siglo XIX.
En concreto, se suspendieron por estar el país inmerso en guerras, la de Cuba de 1896 y la Civil, y una más por motivos económicos, cuando la subida a 60 pesetas del impuesto municipal en 1886 por el montaje en la calle llevó a las comisiones, de forma individual, a no ocupar la vía pública.