La mascarilla se ha vuelto un accesorio imprescindible desde que el coronavirus llegara a nuestras vidas. La pandemia hizo indispensable la utilización de mascarillas para evitar contagios y las autoridades sanitarias no dudaron en obligar su uso. Sin embargo, más de dos años después del estallido del coronavirus, el ministerio de Sanidad se resiste a retirar por completo las mascarillas. En algunos lugares sanitarios es imprescindible llevarla. También lo es en ciertos transportes públicos donde sin mascarilla no se puede acceder a su interior. Este es el caso de los aviones donde cada aerolínea hace lo que considera en cuanto a exigir o no mascarilla. Mientras compañías como Fly Emirates proporcionan a sus viajeros una mascarilla a las puertas del avión, otras como Ryanair optan por exigir este accesorio solo a la vuelta a la casa como si todos los pasajeros tuvieran vuelo de vuelta. Pero no son las únicas aerolíneas que cambian posiciones en cuanto a la mascarilla, en algunos vuelos de Iberia se exige y en otros no. Además, a la hora de ingerir líquidos o alimentos los viajeros permanecen sin la misma.
El uso de la mascarilla lleva toda la pandemia cuestionándose. Si bien al principio de la pandemia estas no eran necesarias, luego fueron más que obligatorias. Asimismo, tras iniciarse la vacunación, el ministerio de Sanidad decidió no imponer su uso obligatorio en exteriores aunque luego tuvo que dar marcha atrás y volver a exigirlas al ver un aumento significativo de casos. Ahora, la mascarilla solo es obligatoria en farmacias, centros hospitalarios y determinados transportes públicos. Según las directrices ministeriales, los aviones también son un lugar donde se debe llevar la mascarilla, sin embargo, las aerolíneas se toman la justicia por su mano y es la tripulación de cada vuelo la que decide si exigirle o no a los viajeros el uso de estos equipo de protección.
El uso de la mascarilla lleva toda la pandemia cuestionándose
En el caso de la aerolínea irlandesa Ryanair llama la atención las indicaciones de los últimos vuelos. En las líneas procedentes de Madrid solo se exige la mascarilla en los vuelos de vuelta, es decir, en el vuelo de ida puedes ir con la cara descubierta. Pasando por alto que no todos los pasajeros volverán al destino, sorprendentemente la low cost ha decidido solo exigir la mascarilla en los vuelos de retorno. Dicha medida ha sido acogida con escepticismo por algunos viajeros que sí han decidido llevar la mascarilla también en los vuelos de ida.
Por su parte, el ministerio de Sanidad, liderado por Carolina Darias, ha decidido no mojarse en el asunto. Darias ha decidido dejar la pelota en manos de las aerolíneas que a su vez delegan en la tripulación de cada vuelo si exigir o no la mascarilla a sus clientes. En lo que sí ha decidido tomar la iniciativa el departamento que dirige Carolina Darias es en seguir sin proporcionar datos sobre la evolución epidemiológica de la pandemia por coronavirus.
SIN MASCARILLA PERO CON CUARTA DOSIS
Aunque el ministerio de Sanidad haya decidido pasar por alto el uso de la mascarilla, el departamento que dirige Carolina Darias sí se ha posicionado a favor de inocular la cuarta dosis de la vacuna contra el coronavirus. En este sentido, el Gobierno de España ha obtenido más de un millón de dosis para vacunar a la población de riesgo de cara al próximo inverno. De este modo, los ciudadanos españoles podrán inyectarse una cuarta dosis contra el coronavirus que, según ha explicado el Ejecutivo, es muy efectiva contra la variante ómicron.
Así, Sanidad ha confirmado la cuarta dosis de la vacuna para toda la población. La medida ha sido anunciada por la Comisión de Salud Pública, en el marco de las variantes BA.4 y BA.5 que son cada vez más frecuentes en Francia e Italia. Como consecuencia de ello, podría volver a regir el certificado Covid para entrar a cada país europeo, entonces serían necesarias cuatro dosis.
En Europa, las variantes BA.4 y BA.5 son cada vez más frecuentes en Francia, y deberían imponerse a BA.2, mayoritaria desde principios de año. La agencia de salud francesa confirmó la aceleración de casos en sus últimas cifras semanales, así como el aumento de estas dos subvariantes. Una situación similar a la que se vive en Alemania y Reino Unido, y lo mismo está pasando en España. Según varios especialistas, el fin de las medidas de control sanitarias, favorece este aumento de contagios y los viajes que están en aumento.
En cuanto a fechas, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, dijo que la cuarta dosis se ha aprobado en la “Comisión de Salud Pública, falta decidir cuándo”, aunque lo más posible es que sea para el otoño, cuando llega la campaña de la gripe. La ministra ha añadido que “una fecha que se baraja como posible es en torno al otoño, estamos esperando para esas fechas las llegadas de nuevas vacunas adaptadas a variantes, como está en los contratos que hemos firmado con las farmacéuticas”.