El Gobierno de Alemania ha afirmado que el suministro de gas está plenamente garantizado, a pesar de un «tenso» contexto que ha sumado este viernes un nuevo capítulo con el anuncio del cierre indefinido del gasoducto ‘Nord Stream 1’. Una portavoz del Ministerio de Asuntos Económicos alemán ha evitado valorar este cierre, pero sí ha advertido de que Rusia lleva semanas demostrando su «poca fiabilidad» como suministrador de combustibles fósiles a Europa.
Berlín ve necesario seguir con el progresivo refuerzo de la «independencia» energética frente a Moscú. «Estamos ahora mucho más preparados que hace unos meses», ha enfatizado la portavoz. Las reservas de gas en Alemania rondan el 84,3 por ciento de la capacidad total y el Gobierno prevé llegar «en los primeros días de septiembre» a la meta del 85 por ciento que inicialmente se había fijado para octubre.