Todo comenzó en agosto de 2021. Fue entonces cuando, por primera vez en algún tiempo, la cadena Antena 3 logró imponerse a su gran competidora, Telecinco en lo que a audiencia se refiere. Desde ese momento, parece que esta última, el canal de Mediaset, no ha terminado de levantar del todo cabeza. Ahora Telecinco termina un verano que está de lejos de haber conseguido los números que sus responsables esperaban.
¿Los motivos de este descalabro? Son fáciles de revelar, en cuanto se presta atención a sus apuestas más actuales, y no demasiado fructíferas.
1Telecinco y la guerra de las audiencias
En televisión todo debe ser inmediato y, por supuesto, rentable. Y para ello solo existe una forma de interpretar la prosperidad de una empresa: calcular la cantidad de espectadores que cada día deciden ponerse enfrente del televisor y atender a su programación diaria. Durante bastante tiempo dio la sensación de que Telecinco, con su propuesta centrada principalmente en realities, magacines y corazón, era imbatible. Ahora se ha demostrado que no.
En el último mes de agosto, sus números no solo no mejoraron los de comienzo de verano, cuando Mediaset tomó medidas para remontar su situación, sino que las han empeorado.